Guaguas aprende a sufrir para sumar su tercera Supercopa

Guaguas y Soria han brindado este mediodía entre los muros del Centro Insular de Deportes uno de esos partidos para la historia, al que no le ha faltado nada, incluido el final feliz que ha llevado a los amarillos a poder coronarse por tercera vez en su historia -segunda desde su refundación- como campeón de la Supercopa.

Más allá del brillante juego exhibido por los dos equipos durante toda la final, es imposible no colocar el prisma sobre el duelo que han ofrecido el italiano Paolo Zonca en el bando amarillo (23 puntos) y el portugués Bruno Cunha (24 puntos), en el celeste, que se han erigido en el héroe y el villano de la función, con los roles cambiados para sus respectivos entrenadores.

Por su parte, Sergio Miguel Camarero, terminaba el partido en la banda con su impoluto traje bañado en el sudor de esa pasión que desata en cada jugada y que transmite a sus hombres para seguir haciendo de la Roca un fortín inexpugnable para sus rivales.

El CV Guaguas conquista su tercera Supercopa de España

Ver galería

Ni los más optimistas alcanzaban a imaginar una final tan igualada, con un Soria que como advertía Juan Pablo Moreno en la previa, desembarcaba en la Isla con el objetivo de nunca bajar los brazos y ¡vaya si lo lograron!

El equipo de Luis Alberto Toribio se mantenía tranquilo a pesar del parcial de salida de 4-1 que le endosaba el Guaguas en el arranque del choque con Wallyson Souza, Nico Bruno y Paolo Zonca como principales estiletes. Los celestes se mantenían en la lucha, arriesgaban en el saque y se apoyaban en el acierto de Cunha y del examarillo Olalla para no perder de vista a un Guaguas que elevaba su renta hasta los cinco puntos de diferencia.

Pero todo cambiaría superado el ecuador de un primer asalto en el que Cunha, Olalla y Flores aparecían en escena para complicar con su saque la recepción de los insulares que veían como los sorianos les alcanzaban en la recta final del asalto para dar la primera sorpresa al cerrar a su favor el set con un bloqueo de Lorente que suponía el 23-25.

Toque de atención celeste y reacción

El Guaguas encajaba el golpe con entereza, Camarero comenzaba a mover su banquillo y Paolo Zonca junto a Wallyson Souza saltaban al rescate para restablecer la igualada en el segundo asalto (25-20) y ponerse por delante en el partido en un tercer cuarto que Vigrass se encargaba de poner de cara en su arranque para que Zonca rematase la faena colocando el 25-19 en el electrónico.

Sin embargo, la exhibición de Cunha en el cuarto round volvía a coger con el pie cambiado a los grancanarios que sufrían de lo lindo para frenar las embestidas del portugués, que se merendaba a la defensa amarilla y destrozaba con su saque a la recepción del campeón de liga, para dar la gran sorpresa de forzar el tie-break al cerrar Villalba el definitivo 22-25.

El sueño del Soria se tornaba en pesadilla casi desde el arranque del quinto y definitivo set, en el que Paolo Zonca y Wallyson Souza recuperaban el protagonismo en ataque para colocar un 10-4 de salida que colocaba la final muy cuesta arriba a pesar de los últimos coletazos de Cunha que no bastaban para evitar su derrota final por 15-8, que convertía a los amarillos en Supercampeones por tercera vez en su historia.

Suscríbete para seguir leyendo