La Audiencia de Las Palmas ha iniciado el juicio contra Henry Danny García Hernández, que mató de 15 puñaladas a la joven Yessica Paola Gómez en Fuerteventura en diciembre de 2015. El acusado, que permanece en prisión desde esas fechas, se enfrenta a 20 años de cárcel por un delito de asesinato con ensañamiento y alevosía.

Henry García admite el crimen, pero asegura que vino precedido de un intento de agresión previo con otro cuchillo. Su defensa reclama una condena por homicidio, con una pena más blanda, de 10 a 15 años de prisión.

Las acusaciones, en cambio, piden al jurado popular un veredicto de culpabilidad por asesinato, porque tras el crimen, que ocurrió el 9 de diciembre de 2015, hay dos víctimas: Yessica y su hijo, de siete años. "Imagínense el drama que tiene el niño. Presenció el crimen. Seguía agarrado a su madre cuando llegó la policía", expuso la fiscal de Violencia de Género en Las Palmas, Beatriz Sánchez.

"La violencia ha sido brutal. Hay que dar voz a todas esas mujeres que ya no pueden hablar. En lo que va de año van 37 mujeres asesinadas, tres canarias, y la media es superior a los 60 crímenes anuales.

"No estamos ante un asesino y calcular. Perdió el control de sí mismo por las circunstancias", replicó la defensa, que basa su estrategia en la supuesta naturaleza controladora de la víctima. "Era muy celosa, me dejó encerrado dos veces en casa" y me revisaba el móvil", declaró el acusado.

De los detalles de las 15 cuchillas, los golpes en la cara y los gritos para que no le hiciera daño al niño no recuerda nada.