Veneguera: el belén viviente más canario

El día de Navidad, la localidad de Veneguera se volvió a volcar con su Belén Canario, una representación que este año ha cumplido su trigésima sexta edición y que además de recrear el nacimiento de Jesús es también una muestra de oficios y actividades tradicionales para su conservación, a lo que se suman degustaciones de productos como el pan de puño, tortillas de calabaza y naranjas de la zona, bollos artesanos, suero de cabra y la música popular canaria.

Un grupo formado por 200 personas, la mayoría de la localidad moganera, volvió a hacer realidad este Belén Canario, que se ha convertido en uno de los actos más importantes del programa navideño de Mogán, por su originalidad y vistosidad, y a la que cada vez más acuden más personas de otros municipios de la Isla.

Este año Tai hizo de Virgen María, Angelo, de San José, y Jimena, de niño Jesús. A la salida de la iglesia, las parrandas Umiaya, Los Labrantes y Tempranillo le regalaron el villancico popular canario 'La Cunita', y comenzó el recorrido por las calles de Veneguera hasta llegar al entorno natural del parque La Cardonera, que ofrecía un recorrido circular.

Más de 4.000 cuadrados acogieron las 40 escenas o paradas que conforman este acto. Artesanos de la herrería, de la piedra, de cuernos de cabra, corrales de ovejas, lavanderas a la antigua usanza y hasta la recreación de una escuela de las de antes o el típico patio canario. También, en el recorrido gente haciendo y repartiendo al público pan, tortillas de calabaza, chocolate y café, y exhibiciones del salto del pastor entre otros detalles.

Una parte del público, sobre todo los más jóvenes, pudieron descubrir también un retrete de los de antes, «de los que llevaban un agujero en el suelo», explicó Antonio Suárez, del Colectivo Belén Canario de Veneguera.

La cita se ha convertido en uno de los grandes actos del programa navideño de Mogán

Suárez destacó la participación de la gente del pueblo y de otros municipios, muchos de ellos artesanos y músicos, que cada año hacen posible esta representación. «Es un momento de unión entre toda la gente del pueblo y vemos cómo niños y niñas que han crecido participando en el Belén Canario van ocupando otros puestos dentro del acto y de la organización», afirmó, y añadió que cada año intentan que sea diferente, cambiando de lugar algunas escenas, y también añadiendo novedades, «como hemos hecho este año con el Baile de San Pascual, que se celebra con velas».

El miembro del colectivo también destacó la labor e implicación de otras personas que pertenecen a la asociación, como Josefina, Alicia y Lola, o Nicolás, que es uno de los impulsores de este Belén Canario.

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