El instituto Franchy Roca cuenta en la actualidad con 264 estudiantes de Secundaria y es una Torre de Babel a pequeña escala ya que en sus aulas conviven niños de 18 nacionalidades, incluida la española. Es, además, uno de los pocos centros públicos de la isla que acogieron las aulas enclave. En este curso escolar, nueve niños con dificultades de aprendizaje se forman entre sus muros.

La directora del centro, Lucrecia Betancor, reconoce que es "muy complicado" trabajar con un colectivo tan diverso. Pero afirma que gracias a las clases de apoyo idiomático y a los proyectos de interculturalidad que desarrolla el centro desde hace cinco cursos, las dificultades se han solventado.

En la actualidad, un 17,05% del total de escolares tiene otra nacionalidad. Principalmente, China, Bolivia, Ecuador, Colombia y Marruecos.

El secretario del centro, Juan Antonio Rodríguez, que también fue director del instituto, explica que se hace mucho hincapié en que los chicos aprendan valores humanos. "Buscamos que los alumnos se preocupen con las cosas, que participen, que sean solidarios. La base es que el alumno se integre en su barrio", aclara.

El centro forma parte de la Red de Escuelas Solidarias y está abierto a cualquier iniciativa educativa más allá de su horario lectivo.