Puerto

Las tasas por la ocupación del Muelle Deportivo frustran su adjudicación

Puertos de Las Palmas rechaza el proyecto porque la empresa excluye más de 100.000 metros de uso público

La propuesta denegada la firma el expresidente de la Autoridad Portuaria e ingeniero José Manuel Arnáiz

Veleros en el muelle deportivo.

Veleros en el muelle deportivo. / LP / DLP

Las discrepancias jurídicas sobre el canon a pagar por la ocupación y explotación del Muelle Deportivo de Las Palmas de Gran Canaria frustraron su adjudicación directa a la empresa Gythio Capital SL. 

Esta compañía, que está respaldada por dos firmas locales y un inversor nacional con presencia en otras siete marinas, presentó una oferta para ampliar y explotar el recinto tras el fracaso del concurso público convocado al efecto, pero la Autoridad Portuaria de Las Palmas (APLP) la ha rechazado por no ajustarse a las condiciones establecidas en las bases de la licitación, según la resolución que va este jueves al Consejo de Administración.

La Ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante, cuando un concurso es declarado desierto por la falta de propuestas, permite la adjudicación directa del proyecto siempre que se respeten las bases de la licitación. Según los informes técnicos, Gythio Capital incumple ese requisito y, por tanto, procede declinar su oferta y volver a convocar un concurso público.

Discrepancia jurídica

El motivo de la discrepancia radica en la tasa de ocupación. Puertos de Las Palmas sacó a licitación la totalidad del Muelle Deportivo, incluidas las nuevas infraestructuras proyectadas, tanto en suelo público como en los espacios de uso privativo, pero la propuesta económica de la empresa excluía de la base imponible las superficies de tierra que no son susceptibles de aprovechamiento comercial, tales como escolleras, diques de abrigo, viales, rotondas, paseos marítimos o jardines.

La Autoridad Portuaria inició la tramitación del expediente porque en la solicitud inicial sí se incluía la totalidad del espacio objeto de la concesión. El conflicto vino después, cuando Gythio hizo una interpretación de las bases diferente y pidió que las zonas públicas se excluyeran para no pagar esas tasas o, en su defecto, que se le diera a esos terrenos un valor igual a cero.

Barcos de recreo en el Muelle Deportivo | 12/01/2024 | Fotógrafo: José Carlos Guerra

Barcos de recreo en el Muelle Deportivo | 12/01/2024 | Fotógrafo: José Carlos Guerra / José Carlos Guerra

En concreto, durante los ocho meses de tramitación del expediente, la compañía modificó dos veces la superficie de ocupación prevista en las diferentes fases del proyecto. De los 182.000 metros cuadrados previstos inicialmente en la zona de tierra se pasó a 126.000, mientras que la lámina de agua se redujo de 304.000 metros a 263.000.

Posición ventajosa

Los técnicos, grosso modo, entienden que estas modificaciones incumplen las bases del concurso público, pues disminuyen el espacio físico de la concesión y, por tanto, las tasas que debería ingresar la Autoridad Portuaria por la ocupación del suelo, obteniendo así la empresa una posición ventajosa respecto a las condiciones de la licitación que fue declarada desierta. La superficie mínima de ocupación, en ese sentido, es de 179.271 metros en la zona de tierra y de 326.059 en la lámina de agua. En total, 505.330 metros frente a los 390.000 que propone la empresa en su solicitud.

El proyecto de Gythio Capital está elaborado por José Manuel Arnáiz, que fue presidente de la Autoridad Portuaria de Las Palmas y es ingeniero de Caminos, Canales y Puertos. Contempla un plan en varias fases para ejecutar las obras portuarias, como los diques en las dársenas sur y norte, que están destinados a la creación de otros 1.000 atraques, entre otras infraestructuras marítimas, siempre con la finalidad de captar más embarcaciones y de mejorar los servicios náuticos. En total, 21 meses de ejecución con un presupuesto base que supera los 26 millones. La actuación en la zona de tierra también dispone de un plan de urbanización específico, aunque con un presupuesto menor al de la obra marítima proyectada, sobre los 15 millones.

Nueva asistencia técnica

Arnáiz, durante la vigencia del concurso, recurrió los pliegos de la licitación ante el Tribunal Económico Administrativo, con el argumento general de que las condiciones establecidas hacían el proyecto inviable en términos de rentabilidad. El tribunal dio la razón a la Autoridad Portuaria, pero ninguna empresa se presentó luego a la convocatoria, que finalmente quedó desierta. Por eso se volverá a empezar desde cero con una nueva asistencia técnica, que será la encargada de elaborar las bases.

Detrás del proyecto de Arnáiz están Newport y Rodritol, dos grupos empresariales que planeaban ir en UTE con Gythio Capital para ejecutar la ampliación de la marina. Las fuentes consultadas no descartan que la negativa a su proyecto acabe en lo contencioso-administrativo.