Los canarios ganan al menos cinco kilos durante el año de pandemia

Cuatro de cada diez canarios dejó de hacer ejercicio durante el confinamiento. Así lo deja entrever el informe Las consecuencias psicológicas de la Covid-19 y el confinamiento que también incide en que otro 45% de los canarios tuvo hábitos alimentarios poco saludables al refugiarse en alimentos hipercalóricos. Son muchos los que siguen arrastrando ese descuido de tres meses, que a día de hoy se ha manifestado en un aumento de peso de al menos cinco kilos. Los médicos alertan de lo peligroso que puede llegar a ser un incremento en el peso de estas características, pues puede derivar en peores controles de enfermedades de base así como diagnósticos de nuevas patologías en personas que hasta hace un año se encontraban totalmente sanas.

La obesidad es una lacra en Canarias que sufre el 19,3% de la población, según los datos proporcionados por el Ministerio de Sanidad, siendo más importante en mujeres (21,4%) que en hombres (17,2%). Esos kilos de más son los que hacen a los canarios más propensos a sufrir eventos cardiovasculares de manera temprana o a dañar su páncreas hasta desarrollar una diabetes tipo 2 que los acompañará durante toda la vida. “El aumento de peso desestabiliza a los diabéticos y empeora los niveles de colesterol”, insiste la médico de familia, Candelaria Díaz. Cabe recordar que ya en 2017 el 15,7% de la población canaria estaba diagnosticada de colesterol alto y hasta un 11% –el porcentaje más alto de España– sufría diabetes. Este descuido se ha visto reflejado notablemente “en los jóvenes”, aunque son ellos los que también se han recuperado antes.

“Las personas mayores se han cuidado más”, indica la facultativa, que recuerda que su condición de pacientes pluripatológicos les hacen ser mucho más cautos con su salud. No es de extrañar pues , según la encuesta Covid-19, percepción social y económica editada por el ISTAC, aunque hoy un 10,1% de la población canaria está preocupada por su salud, la inquietud es más acuciante entre la población mayor de 60 años, para los que llega a ser la tercera con más relevancia, detrás del paro y la situación económica.

Más personas han sufrido infartos en casa por miedo a acudir a urgencias

Sin embargo, a este grupo de edad les está costando más retomar la rutina. Aunque son menos los afectados en entre ellos, los mayores que han ganado peso durante este año son los que más están sufriendo para recuperar su figura. “A las personas mayores les cuesta mucho salir, hay que insistirles para que lo hagan, si no, se quedan enclaustrados”, señala Candelaria Díaz.

Al confinamiento abrupto de la población en marzo de 2020 se han unido el miedo al contagio, el estrés, la ansiedad, los problemas económicos y el continuo cierre y apertura de gimnasios. Unas circunstancias que poco a poco han mermado la actitud proactiva de la población para realizar más deporte o cuidarse más. “Mucha gente está preocupada y busca ayuda”, señala Águeda Caballero, endocrinóloga del Hospital Universitario de Canarias (HUC), que asegura que, “independientemente de que acudan a consulta por un problema de peso o no, muchos pacientes muestran inquietud por haber cogido cinco kilos o incluso más”. No hay datos que constaten el aumento de peso de la población canario, pero un año después del confinamiento, la realidad se deja ver en las consultas médicas en el archipiélago.

“Hemos empezado a ver muchas trombosis venosas en piernas”, indica Díaz, que asegura que esta situación ha sucedido especialmente en personas “que no se movieron nada durante esos tres meses y a las que, una vez se levantó el confinamiento, les costó mucho comenzar una rutina de ejercicios”. Los hábitos sedentarios han calado en gran parte de la población y también en aquellas personas que tienen riesgo de sufrir eventos cardiovasculares.

Más infartos en casa

“Ha habido muchos infartos, y la mayoría de ellos se han pasado en casa”, narra Díaz. De hecho, algunos pacientes han sufrido una pérdida de sus facultades al no haber recibido tratamiento a tiempo, especialmente durante la etapa del confinamiento, donde el miedo derivó en un menor porcentaje de visitas a los centros de salud.

Pero si algo ha empeorado durante este año es la diabetes. “El control de esta enfermedad ha empeorado mucho, ha aumentado el número de pacientes que abandona la medicación”, señala Caballero. “Al retomar las consultas programadas nos encontramos con que tenían un mal control de la glucemia”, indica, por su parte, Díaz, que admite que en algunos de ellos “hemos tenido que reajustar la cantidad de insulina o incluso modificar la medicación”. En este contexto, los expertos insisten en que “los fármacos resuelven, pero no lo son todo”. Así lo afirma Candelaria Díaz porque es consciente de que muchos pacientes consideran que mientras estén en tratamiento pueden seguir teniendo hábitos de vida poco saludables. El ejemplo está en la diabetes. “Lo cierto es que las personas que se lo toman en serio y cuidan su dieta acaban suspendiendo su medicación”, afirma la médico de familia, que asevera que “un cambio de hábitos puede tener más impacto en la morbimortalidad que el propio fármaco”. Las recomendaciones siempre son las mismas: cuidar la alimentación y retomar la actividad física. En este sentido, las especialistas aconsejan bien salir a caminar al aire libre, acudir a centros deportivos cuando el semáforo de restricciones lo permita o realizar otro tipo de ejercicio en casa. El Ministerio de Sanidad, por su parte, añade también no estar más de 2 horas sentado, utilizar escaleras en lugar de ascensor y moverse en bici o andando.

A raíz de esta situación, la consejería de Sanidad y la de Educación han acordado la creación de una mesa de trabajo multidisciplinar junto a la plataforma Más Deporte Canarias, con el objetivo de emprender acciones relacionadas con el deporte y la salud, entendiendo la actividad física como un factor fundamental de la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad. Este grupo de trabajo podrá también ejercer funciones de asesoramiento en determinadas cuestiones relacionadas con las actividades deportivas, velando por garantizar la seguridad sanitaria para las personas que practican cualquier tipo de deporte.

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