Esta es a la velocidad a la que saltan los radares de la DGT

Cuando se habla de radares, una de las preguntas más comunes que surgen es sobre la precisión de estos dispositivos al medir la velocidad de los vehículos. La DGT ha establecido un margen de error para asegurarse de que los radares solo salten cuando detecten una velocidad anormalmente alta. Este margen no se debe a un fallo en el dispositivo en sí, sino que está establecido por ley.

El margen de error varía en función de la velocidad a la que se circule y el límite de velocidad de la vía. En general, existe un margen de error del 5-7% o de 5-7 km/h. Antes de 2014, este margen era de 10 km/h, pero la reforma del Código de Circulación estableció dos tolerancias distintas para los radares fijos: 5 km/h y un 5%. En vías con límites de velocidad de hasta 100 km/h, el margen de error es de 5 km/h, lo que significa que se puede circular hasta 5 km/h por encima del límite sin ser sancionado. Por encima de los 100 km/h, el margen de error es del 5%.

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Los radares móviles también tienen un margen de error, que es ligeramente superior al de los radares fijos. Este margen es del 7 km/h o del 7%. Al igual que en los radares fijos, el margen de error varía en función del límite de velocidad de la vía.

En resumen, los radares no son precisos como un bisturí, ya que existe un margen de error establecido por ley. Sin embargo, este margen está diseñado para asegurarse de que los radares solo salten cuando detecten una velocidad anormalmente alta. Es importante recordar que el objetivo de los radares no es sancionar a los conductores, sino garantizar la seguridad en las carreteras. Por lo tanto, es importante respetar los límites de velocidad y conducir de manera responsable.