Plocan innova su flota de robótica submarina con una novedosa tecnología acústica

La Plataforma Oceánica de Canarias (Plocan) ha incorporado a su flota de vehículos planeadores submarinos o gliders, una nueva tecnología de «acústica pasiva» que amplía la capacidad y calidad de observación científica en el océano. El sistema Auris permite una mejor nonitorización de las poblaciones de cetáceos en Canarias y el resto de la Macaronesia, además del impacto del ruido en los ecosistemas marinos más implicados en actividades de economía azul, según avanzó Carlos Barrera, responsable de la Unidad de Vehículos Marinos de Plocan.

«La acústica pasiva es una novedad tecnológica con la que dotamos a nuestros gliders submarinos, y se enmarca dentro de la directriz europea que establece la necesidad de medir todo aquello que tiene que ver con el ruido submarino, dado el incremento de la actividad en las zonas costeras, fundamentalmente, con el auge de nuevos sectores socioeconómicos que generan un impacto acústico, y que conviene monitorizar para ver como afecta a los ecosistemas. Puede darse el caso de poblaciones de determinadas especies que se vayan de la zona por el ruido, por ejemplo».

La acústica pasiva, una técnica emergente que permite chequear poblaciones animales sin alterar su comportamiento, es una metodología de creciente uso y gran potencial, no sólo en estudios de ecología o conservación, sino también para documentar la biodiversidad de un planeta sujeto a un acelerado cambio global.

Entre las ventajas de la nueva tecnología figura su pequeño tamaño y bajo consumo energético

Entre las aplicaciones más directas y de mayor interés que tiene el sistema Auris de acústica pasiva, instalado en la robótica submarina de Plocan, destacan la monitorización de cetáceos a partir de sus trazas acústicas, así como la medida del posible impacto del ruido submarino en los ecosistemas de zonas donde se desarrollan actividades vinculadas a la economía azul, tales como acuicultura, turismo, transporte marítimo o energías, entre otros.

«Al sistema de acústica pasiva, comúnmente le llamamos oreja, es decir, es como si pusiéramos una oreja en el glider, que escucha unas frecuencias determinadas. Es básicamente un hidrófono pasivo que escucha y lo que le llega en una determinada frecuencia, lo detecta, lo procesa y genera información de valor»

Su instalación en los gliders de Plocan responde a la directriz europea sobre la medición del ruido submarino

Entre sus ventajas, Carlos Barrera señala que se trata de un sistema de reducido tamaño, que consume muy poca batería. «Tiene unas ventajas tecnológicas para poder ser integrado en una plataforma pequeña como es un glider. «Lo podríamos llevar en un barco o poner fondeado en el mar, pero aquí la ventaja es que la tecnología ha avanzado para hacerlo muy pequeño y mucho más eficiente en plataformas autónomas. Al final, todo evoluciona, estamos ante una tecnología minúscula, que consume menos energía y que es capaz de procesar información de forma mucho más rápida, y por eso hemos llegado al punto tecnológico de que se puede integrar en una plataforma autónoma como es un glider».

Plan estratégico

El acopio de nuevos equipamientos altamente especializados, como es el caso del sistema de acústica pasiva Auris, que permite la grabación de sonidos con sensores automáticos orientada al seguimiento y evaluación de las poblaciones animales y los ecosistemas, forma parte de la continua mejora de capacidades y recursos que Plocan ha contemplado en su actual Plan Estratégico, al objeto de dar respuesta al conjunto de las necesidades técnicas y operacionales como infraestructura de prestación de servicios.

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