Tribunales

Un hombre esquiva la entrada en prisión tras tocarle el pecho a una octogenaria

La fiscal rebaja la petición de pena al tratarse de un abuso y no de una agresión sexual, por haberse producido antes de la entrada en vigor de la ley del solo sí es sí

El acusado, de espaldas, en el juicio que tuvo lugar este jueves en la Audiencia de Las Palmas.

El acusado, de espaldas, en el juicio que tuvo lugar este jueves en la Audiencia de Las Palmas. / B. M.

Benyara Machinea

Benyara Machinea

Un hombre sexagenario ha esquivado la entrada en la cárcel tras tocarle el pecho a una amiga, de 80 años, en su vivienda de Las Palmas de Gran Canaria. La fiscal Ruth Díaz y la acusación particular han rebajado la petición de pena inicial, de tres a un año de cárcel, con el pago de 3.000 euros de indemnización. El letrado de la defensa, por su parte, ha solicitado la suspensión de la entrada en un centro penitenciario porque el acusado no tiene antecedentes penales.

Las partes han llegado a un acuerdo en el juicio celebrado este jueves ante la Audiencia Provincial de Las Palmas y la magistrada ponente, María Pilar Verastegui, ha avanzado que la Sección Segunda dictará una sentencia con los términos de la conformidad. La rebaja de la petición de pena se debe a que el delito, que fue tipificado por la fiscal como una agresión sexual en aplicación de la ley del solo sí es sí, ha sido sustituido por un abuso sexual, ya que se produjo en junio de 2022, meses antes de que entrara en vigor la nueva legislación.

Los dos amigos habían quedado en la vivienda de la denunciante el 22 de junio de 2022 para tomar algo juntos. En un momento dado, el encausado se aprovechó de la relación cercana que tenían ambos para "atentar contra la libertad sexual" de la señora, según la fiscal. En ese momento, le tocó el pecho sin su consentimiento.

Orden de alejamiento

Los términos del acuerdo también suprimen la inhabilitación especial para ejercer cualquier profesión que implique un contacto regular con personas menores de edad, aunque mantienen la medida de libertad vigilada durante cinco años y la orden de alejamiento, para que no se pueda acercar a menos de 500 metros de la víctima, por tres años.