La sangría de la UD: nueve goles encajados en 210 minutos, los mismos que en las doce jornadas previas al Metropolitano

Carga de Goma-2 en la muralla de hormigón armado de Álvaro Valles. Nueve goles en contra en las últimas tres jornadas (ante Atlético de Madrid en el Civitas Metropolitano 5-0, CA Osasuna en el Gran Canaria 1-1 y Getafe CF en el Coliseum 3-3) en un tramo negro para la UD de los récords. «Hemos dado muchas facilidades», lamentó García Pimienta tras encajar tres dianas en el primer acto ante la formación azulina de Bordalás.

A pesar de la sangría, la formación amarilla luce el mejor dato defensivo de sus 35 temporadas en Primera en la jornada 27: 29 goles encajados. Un dato que deja a los isleños como el cuarto menos batido de la competición, por detrás del Real Madrid (18) Athletic Club de Bilbao (26) y Real Betis (28). La UD está igualada con 29 en contra con Real Sociedad y Atlético de Madrid cuando ya solo restan once jornadas para el fin de curso. 

Si se analiza con más profundidad, los nueve goles en contra llegan en 210 minutos. La sangría comienza en el minuto 15 del Atlético-UD Las Palmas del Metropolitano con el tanto de Llorente. Luego marcaron, de nuevo Llorente (20’), Ángel Correa (47’ y 62’) y Memphis Depay (87’). En la siguiente jornada liguera, Unai García, con una sensacional volea, batió a Valles en Siete Palmas (49’).

Ya en el Coliseum, feudo donde nunca han ganado los amarillos, llovieron los zarpazos de Jaime Mata (11’), Mason Greenwood (14’) y Maksimovic (45’). Del mal despeje de Sergi Cardona, que golpea en Máximo Perrone y deja el balón franco a Llorente (minuto 20 de la 25ª jornada), al remate sin oposición del ariete serbio, el pasado sábado, bailan los 210 minutos macabros. El carrusel de disparates son una mezcla de imprecisiones y falta de contundencia.

Elementos desconocidos en las 24 jornadas previas del campeonato. Un tramo donde el bloque de Pimienta solo habían recibido 20 dianas. Los pío pío y su muralla de acero eran el segundo equipo menos batido, solo superados por el Madrid (que solo había recibido quince).

Cabreo en sala de prensa

Antes de esa jornada 25, la UD nunca había encajado cinco tantos en un mismo partido, tampoco tres. El mayor castigo lo recibió en el Santiago Bernabéu (2-0) el pasado septiembre. El resto de derrotas (8), fueron por la mínima. Cabe reseñar que en esa fase de máximo rigor, las primeras 24 fechas ligueras, los amarillos batieron al Atlético de Madrid (2-1) y resistieron de forma épica las visitas del Barça (1-2) y Real Madrid en el partenón de Siete Palmas. La victoria azulgrana llegó en el 93’ con un controvertido tanto de pena máxima de Gundogan. Por su parte, los blancos lo hicieron gracias a un saque de esquina en el 84’.

Llorente aprovechó un rebote en el área y batió a Valles. En el 2-0, Coco se resbaló. En el tercero, Kirian pecó de falta de confianza ante el empuje de Koke y el delantero argentino recibió sin oposición. Marvin Park comete pena máxima sobre Lino y Memphis aprovecha el agujero en la zona central de la retaguardia -Mika Mármol y Sinkgraven salen en la foto-. No era lo habitual, para una retaguardia que suma siete porterías a cero. El credo del orden.  

 Ante Osasuna, un centro de Mojica desde la derecha y Unai García pone el esférico en la escuadra con una volea desde el corazón del área. Valles hizo la estatua. El remate llegó sin oposición. Kirian logró empata a los 150 segundos. En relación a lo acontecido en Getafe, la falta de coordinación a la hora de tirar la línea defensiva. A los diez minutos, de la forma más primitiva, un balón cruzado al área de Rico, deja solo a Mata. Demasiado fácil. La fórmula se repite en el 2-0 en el minuto 13 tras una pérdida infantil. Contragolpe y envío fulminante a Greenwood.

Para cerrar un primer acto funesto, Mata conecta con Maksimovic y Sergi Cardona, que luego marcó para vengarse, no está atento al pistolero serbio. Tres goles, tres errores clamorosos.  

Pimienta, en sala de prensa, no se mordió la lengua. Alta y claro para denunciar falta de intensidad. En el segundo acto, en una oda al fútbol, lograron empatar.  

«Que los rivales nos marquen goles entra dentro de la normalidad. Miras los jugadores que tiene el Getafe y puede pasar. Lo que no puede ser es que nos metan este tipo de goles con tanta facilidad. En las tres ocasiones se han presentado delante de Valles (...) A nivel defensivo no hemos estado a la altura (...) Hemos de corregir los errores. En tres partidos hemos encajado nueve goles, porque si en algo éramos buenos era que defendíamos juntos. Costaba muchísimo hacernos un gol. Hay que corregirlo para lo que resta».

Diez tantos de local

Los amarillos solo han recibido diez tantos en el Gran Canaria, en lo que representa el tercer mejor dato defensivo de local, solo superados por el Real Madrid (7) y Valencia CF (8). Con Valles en la prelista de Luis de la Fuente, el trabajo defensivo de la UD, más allá del apagón de las tres últimas jornadas, ha sido elogiado por los técnicos y analistas de Primera.

Defender desde el control (60 % de posesión, segundo equipo de mayor gobierno tras el Barça, 65 %) dio resultado. Pero los rivales tienen su servicio de inteligencia. Le han pilado la matrícula a Pimienta, que adolece de cintura para explorar otras vías en situaciones límite. La presión del Geta hizo estragos. «Tenemos que mover más rápido el balón», recetó Loiodice. 

29 goles encajados en 27 jornadas. El mejor dato en la historia de la UD en Primera (35 campañas). Pero nueve tantos en 210’ negros, los mismos que se recibieron en doce contiendas previas al Atlético-Las Palmas -de la 13ª en El Sadar el 11 de noviembre a la 24ª ante el Valencia el 10 de febrero-.