Es un auténtico misterio. Muchos lugareños han oído algo, otros conocen de su existencia, y hay quienes se aprovechan de su presencia. En el Puerto de las Nieves, en Agaete, hay vía libre para entrar a internet sin tener que pagar un céntimo por el servicio, con disponer de un ordenador o cualquier otro dispositivo que lo permita. Lo hace posible una red wi-fi que lleva el nombre de Bentago, que probablemente da una esclarecedora pista sobre su verdadero origen. Además, a unos pocos metros de allí atraca un ferry de alta velocidad, con la misma denominación y que conecta a diario con Santa Cruz de Tenerife.

Efectivamente, es el nombre del barco de la naviera Fred. Olsen, que cada día transporta a cientos de viajeros, camiones y turismos al Puerto de Tenerife, en la isla de al lado. Este catamarán, al igual que su hermano Bencomo, ofrece la posibilidad a sus clientes de acceder a internet a través de una wi-fi sin ningún tipo de contraseña ni barrera. Pero, también, sin saberlo, o sabiéndolo, a cualquier internauta que pueda estar tumbado en la playa, o disfrutando de la misma avenida.

Es la ventaja del mundo de las comunicaciones sin cable. Porque no está el verano para estar con el trajín de los cables, enchufes y adaptadores.

Ayer, con el espectacular día, para no variar, que hacía en Agaete, los bañistas se limitaban a disfrutar de la playa sin más preocupaciones, mientras otros comían en las terrazas de los restaurantes.

A pesar de este ambiente plenamente veraniego, nadie logra desenchufarse del todo. Para muchos es imposible, pero el calor anima a salir de casa para refrescarse. Por esto, algunos jóvenes no dejaban de echarle de vez en cuando un vistazo a sus teléfonos móviles provistos de acceso a internet para entrar en la Red, con el fin de chatear y estar al tanto de las últimas noticias del mundo.

Pero si encima se puede lograr sin coste alguno, mejor que mejor. Así lo hacían, entre otros, dos jóvenes capitalinas que se habían acercado al Puerto de las Nieves para compartir un estupendo día de playa. Pero, ¿cómo descubrirlo? "Vimos que nuestros móviles detectaban una wi-fi de nombre Bentago y que no tenía contraseña, con lo que nos conectamos y así tenemos internet gratis". Sin embargo, ninguna de las dos chicas era consciente de que la red procedía del barco y que, cuando este partiese, se les acabaría el chollo. Eso sí, el siguiente no tardaría mucho en llegar, para volver a abastecer a los más enganchados.

Y como ellas, muchas otras personas apasionadas de internet. Aunque no todos los dispositivos son capaces de detectarla, tampoco se puede dejar de destacar la potencia de la señal que llega del fast ferry, porque para alcanzar la zona de la playa e, incluso, la avenida, no puede ser precisamente baja.

Sea como fuere, un gran número de agaetenses, a día de hoy, más que disfrutar de la llegada del barco, se alegra por el retorno de este inesperado servicio. De hecho, algunos de los trabajadores de los negocios de Las Nieves reconocen que muchos de los vecinos ya se saben el truco y aprovechan las paradas del barco en el muelle para poder conectarse a internet de manera gratuita. Así que la noticia ya ha corrido como la pólvora, y cualquiera que necesite conectarse, lo único que tiene que hacer es darse un garbeo por el Puerto de las Nieves. Eso sí, hay que asegurarse de que el barco esté cerca, claro.