El cuajo arrasa en Tejeda con el cierre de la Feria Europea del Queso

Los asistentes de la Feria Europea del Queso celebrada este fin de semana en Tejeda han arrasado con las existencias de las 26 queserías españolas y portuguesas participantes al llevarse a sus casas cerca de 7.500 kilos de estos productos, según calcula la Mancomunidad del Norte. En total han sido unas 25.000 personas las que han recorrido las calles de este pueblo para catar y adquirir algunos de los mejores quesos de Canarias, Menorca, Valladolid, Cataluña, el País Vasco, Cáceres, Málaga y Portugal. 

El número de visitantes duplica de esta forma los de la última edición, celebrada hace un año en Teror, que reunió a 12.000 personas a lo largo de todo el fin de semana. "Los ganaderos que han participado están muy satisfechos porque han vendido casi todo el producto que han traído, sobre todo los vendedores que han venido de fuera de las Islas y de la Península", señaló el alcalde de Tejeda, Francisco Juan Perera. Las compras se mantienen en cifras similares a las del último año, con una media por puesto de 288 kilos de queso vendidos, y duplican las de 2020, que se encontraron en torno a los 4.500 kilos en total.

Queso portugués con sabor canario

Algunas queserías, como la portuguesa Joaquim Duarte Alves, agotaron pocas horas después de su inauguración las existencias y tuvieron que reponer productos de sus almacenes para atender a todas las demandas. Esta cita, enmarcada en la European Cheese Route, contó también con otros puestos de vino y alimentación, así como talleres infantiles dirigidos a los más pequeños y catas para dar a conocer las variedades de la Isla. "Además de para promocionar el producto local y darle un impulso al sector, esta cita ha servido para que la restauración muestre la mejor oferta que diariamente se ofrece en este municipio", aseguró Perera al cierre de la feria. 

Jesús Aramburu, uno de los tres hermanos que conforman la Quesería Aramburu, vino preparado para la ocasión con casi 400 kilos de queso bajo el brazo, después de haber vendido casi toda la producción que trajo en la última edición. El vasco apareció por Tejeda con una txapela y con tres variedades de quesos de etiqueta de denominación de origen de Idiazabal, que solo producen otras dos queserías más de la localidad guipuzcoana. 

"Venimos a gusto todos los años a Gran Canaria, cada edición a un pueblo distinto, y hacemos turismo, amistades, vendemos y estamos mejor que en casa", incidió el ganadero. Entre los distintos quesos de oveja de este puesto, la variedad que tuvo más éxito entre los clientes es la que tiene una curación de un año y medio, así como la crema de queso blanco, que en pocos minutos se agotó. 

También en el puesto de Rafaela Pons, ganadera de la quesería S’ Arangí de Menorca, las piezas que tuvieron más éxito entre los clientes fueron las más curadas. "Nos damos más cuenta cada año de que al público canario le gustan los quesos más sabrosos", aseguró la vendedora, que llegó al municipio del norte de la Isla con 300 kilos de queso listos para vender. De esta forma acercó una muestra de su producción, que elabora con la leche de alrededor de 150 vacas propias. 

"Nos damos más cuenta cada año de que al público canario le gustan las versiones más sabrosas"

Otra de las variedades que pudieron encontrar los asistentes es el queso payoyo, una marca que elabora la empresa Quesos Villaluenga en la Sierra de Grazalema, ubicada en la provincia de Cádiz. "Los canarios son muy queseros, les gusta mucho preguntar, a nosotros también nos gusta explicarles cuáles son los productos que tenemos y siempre nos sentimos muy bien acogidos en la Isla", aseguró Pablo Matoso, propietario de Quesos Villaluenga, que repite un año más. 

En este puesto los clientes compraron sobre todo la variedad de romero y otra versión más picante, que estrenaron en esta feria para comprobar si tenía buena aceptación entre el público. "Hay muchas personas que nos conocen de otros años y que vienen específicamente para buscar nuestros productos", aseguró el ganadero gaditano.

También la producción más cercana del norte de la Isla tuvo su lugar de promoción en esta feria con hasta 12 puestos. Este es el caso de Quesos Manjar de Tejeda, que asegura que en estos días "aumentan mucho las ventas y conseguimos vender lo suficiente para soportar los gastos de todos estos meses atrás, que se han visto especialmente incrementados por la subida del precio de los piensos", aseguró su propietaria, Escolástica Mayor. En esta ocasión han traído una representación de sus quesos tiernos, semis y con almendras, entre los cuales triunfa en este tipo de actos el de almendras.

La tradición de la familia Mayor por el sector del queso arrancó con los bisabuelos de su actual propietaria, que tenían una pequeña ganadería, y continúa ahora con su cuarta generación. "Trabajar los 365 días del año con pérdidas es muy desagradable y, aunque hemos tenido algunas subvenciones y nos han ayudado, aún así cuesta mucho", aseguró la ganadera. 

En esta misma línea coincidió el presidente de la Mancomunidad del Norte de Gran Canaria, Sergio Nuez, quien celebró que esta cita haya colocado a Gran Canaria en el epicentro del mapa gastronómico mundial "en un momento tan complicado para el sector ganadero, asfixiado por la subida de costes de las materias primas". Por su parte, la Asociación de Queserías de Gran Canaria, ASOQUEGRAN, que ofreció lotes de quesos artesanos de la isla, destacó que el queso de flor y media flor siguen siendo los productos estrella de esta feria.

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