Vino, queso y miel para el paladar de los guiris

Maspalomas acerca al público los mejores manjares gastronómicos de las medianías de Gran Canaria con 25 productores locales

Clientes locales y extranjeros prueban el cuajo de la quesería artesanal Los Guedes, ubicada en Vecindario.

Clientes locales y extranjeros prueban el cuajo de la quesería artesanal Los Guedes, ubicada en Vecindario. / LP/DLP

Benyara Machinea

Benyara Machinea

Los mejores vinos, quesos y mieles de las zonas rurales de Gran Canaria encandilaron ayer los paladares de residentes de la Isla y turistas a partes iguales. La Mancomunidad de Medianías recuperó su Feria Regional de Vino, Queso y Miel después de cuatro años de parón por la pandemia con una undécima edición en el aparcamiento del estadio municipal de San Fernando de Maspalomas. El evento regresa en un formato reducido con la participación de 25 productores, la mitad que en la última ocasión, que mostrarán toda una amalgama de alimentos hasta esta tarde, que será cuando la celebración se despida hasta el próximo año. 

A los tres productos clásicos que dan nombre al evento se le unen novedades como el café, ya sea en grano o en taza, el gofio, las mermeladas, los panes o los dulces. Todo un escaparate para homenajear la labor del agricultor y del ganadero local y dar a conocer las mejores bondades de sus productos. La ubicación del espacio favoreció más que nunca la llegada de público extranjero, con una gran cantidad de asistentes que se acercaban por primera vez a la producción local de la Isla. Para guiarles contaron con el consejo de los propios productores, que sacaron muestras y muestras de sus delicias para satisfacer la elevada demanda.

"Todos los años nuestra producción depende del clima porque en la agricultura no mandamos nosotros, manda el tiempo", explicó Antonio Ramírez, dueño de la bodega Frontón de Oro, que se encuentra ubicada a 1.200 metros de altura en el municipio de San Mateo. De hecho cuando empezó a cultivar viñedos, hace ya más de 25 años, fue para adaptarse a un periodo de sequía que le obligó a dejar atrás sus cultivos de frutas y verduras, en los que plantaba tomates, pimientos y pepinos, entre otros alimentos, para buscar una alternativa que requiriera menos agua.

"Dependemos del clima porque en la agricultura no mandamos nosotros, manda el tiempo"

El trabajo que desempeña ahora, desde la vendimia hasta el depósito de la bebida en barricas de roble francés para su crianza, le ha permitido llevar su producción más allá de las fronteras nacionales y cruzando el charco hasta Estados Unidos, que acoge con los brazos abiertos entre un 20 y un 30% de sus botellas en 24 territorios distintos. Tinto o blanco, afrutado o seco, el vinicultor trajo versiones para todos los gustos a la feria con diez variedades distintas de vino. 

Las utilidades que pueden llegar a tener los alimentos muchas veces van más allá de lo evidente y no hay quien conozca mejor estos trucos que los propios ganaderos y agricultores. Sino que se lo digan a Chari Medina, dueña de Masayo, que crea todo tipo de mieles, así como mermeladas, mojos y almogrotes caseros en su negocio de Santa Brígida. Para ella esta idea empezó como una simple afición, pues siempre se había encargado de hacer estos productos en su casa para familiares y amigos. Tenían tanto éxito en su entorno más cercano que, tras muchas insistencias, se decidió a embotellarlos y empezar a venderlos en mercados y ferias. 

Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, brinda con el vino de La Montaña junto a representantes públicos de las medianías.

Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, brinda con el vino de La Montaña junto a representantes públicos de las medianías. / LP/DLP

Es en el entorno del cara a cara con el cliente donde más cómoda se encuentra, pues sus consejos siempre son bien recibidos por los compradores. "Todo tiene un por qué. El preparado de la colmena de miel equinácea y propóleo es para gente que tiene una tos pesada con flema y el de jengibre es para cuando hay pequeños catarros de ‘agüilla’. La mezcla de miel con menta limpia toda la respiración, sobre todo cuando llegan los peores días de calima", explicó la comerciante. Aprovechó la ocasión para presentar una nueva mezcla "plus", formada por miel, polen, propóleo y jalea real. "Eso es una maravilla porque te abre la capacidad de estudio, trabajo, esfuerzo físico y mental y es sano. No tienes que estar tomando café sino que con un poco de esta mezcla estás preparada para funcionar correctamente todo el día", aseguró Medina. 

El lácteo tampoco podía faltar un año más en este encuentro, con especial concurrencia de maestros del queso asentados en el sur y el sureste de la Isla. Juan Francisco Perera, dueño de Quesos El Dragillo, una productora de San Bartolomé de Tirajana, reconoce que cada vez hay menos personas que se dediquen al cuajo en el sur de Gran Canaria. "Se ha convertido en algo habitual que las personas opten por trabajos enfocados en el ámbito del turismo, mientras que en la agricultura y la ganadería somos unos pocos los que aguantamos", comentó el dueño del negocio. 

Admite que este tipo de encuentros siempre son de ayuda a la hora de dar a conocer su producción, que en su caso ha pasado ya por tres generaciones anteriores. Ahora continúa él al frente del negocio pero reconoce que el relevo generacional es algo que está costando más. 

En la carpa se puede encontrar todo tipo de cosméticos naturales, gofio y café molido

Carmen Delia, maestra quesera en El Zurrón, una empresa con sede en Vecindario, precisamente dio a conocer sus variedades en uno de estos encuentros. "Hicimos el primer queso gigante de la Isla, de 250 kilos, y fue un boom que nos permitió mantenernos e ir creciendo como empresa", aseguró su propietaria. Una de las piezas que más llamó la atención de los asistentes que pasaron ayer frente a su puesto es un queso de 20 kilos, que llevaron a cabo de forma manual específicamente para este encuentro. Estos ejemplares de grandes dimensiones los reservan para las ferias porque "llaman mucho la atención de los clientes", algo que se ha convertido ya en su seña de identidad. 

La maestra quesera arrancó con leche de cabra antes de sumar vacas a su ganado y poco a poco han continuado innovando. Ahora están haciendo pruebas con queso al curry y con chili para ver cómo funcionan e introducirlos al público. Esta forma de experimentar les ha permitido alzarse este año con el primer premio de queso semicurado del Cabildo de Gran Canaria, que fue anunciado este viernes. 

Algunos botes de miel de El Colmenar La Violeta.

Algunos botes de miel de El Colmenar La Violeta. / LP/DLP

Por su parte, Gerónimo Marrero, dueño de la bodega La Montaña, aprovechó la ocasión para dar a conocer a los asistentes dos de sus mayores pasiones: el vino y la restauración. El vinicultor suma a sus 14.000 parras uno de los pocos bochinches tradicionales de Gran Canaria, certificado por la Asociación de Empresarios de Vinos de Jumilla (ASEVIN) como el primero en instalarse en España. Marrero se dedicaba junto a su padre a la construcción hasta que llegó la crisis económica y les hizo dejar a un lado ese negocio para enfocarse al 100% en el vino. 

"Ya de por sí al estar en Gran Canaria el vino se distingue por la tipicidad que tenemos de variedades, el clima y el suelo. De hecho somos el único lugar excento de la filosera, una enfermedad que atacó en su momento y destruyó viñedos de todo el mundo, menos de Canarias", afirmó el vinicultor. Ahora afronta las últimas sequías, que le han llevado a pasar de entre 10.000 y 12.000 botellas al año a entre 7.000 y 8.000.

Quesos El Zurrón, de Vecindario, aprovechó la ocasión para presentar una pieza de 20 kilos

La finca El Capote mostró sus variedades de miel de abeja, que producen a partir de distintas colmenas con predominio en Tajinaste, así como el aceite de oliva virgen extra que crean en Valsequillo. Destacó especialmente entre el público la miel en panal, que vendieron en pequeños envases para los clientes. "El turismo está especialmente receptivo, les encanta probar productos de aquí, algo diferente, y también al público local", explicó Almudena Alonso

Junto a los alimentos que dan nombre a la feria llegaron otros productos que no pasaron desapercibidos entre el público, como el café natural de La Sureña. Para crearlo Antonio Pérez, dueño de la empresa, recoge el grano para tenderlo al sol unas horas y después pasarlo a la sombra durante 15 o 20 días hasta que se rebaja la humedad. "Para conseguir un buen café lo primero que hay que hacer es darle solo lo que necesita. Un café no requiere de muchos productos, ninguno prácticamente, solo hay que lavarlo. Otro truco es utilizar maquinarias que no expulsen gases porque el producto recoge todo lo que se genera alrededor de él", explicó el agricultor. 

Los secretos del gofio

El gofio, otro de los ingredientes que se pueden encontrar en esta feria, también esconde sus secretos. "Existen varios tuestes. Está el normal, que es el que tiene un color más claro, que se utiliza para los potajes y la leche. Después está está la versión un poco más tostada, a la que llamamos dos y medio, que sirve para la leche y para el escaldón. También están el 3, 4 y 5 que son más quemados y son aptos para las personas diabéticas", incidió José Antonio Hernández, dueño del Molino de Gofio San Pedro

El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, acudió a la apertura junto al presidente de la Mancomunidad de Medianías de Gran Canaria, Francisco Juan Perera, así como representantes de los municipios de Valsequillo, Santa Brígida, San Bartolomé de Tirajana, y de San Mateo. "Espacios como este son indispensables para el desarrollo del sector primario y la soberanía alimentaria de Gran Canaria. Hemos pasado de un 20% de consumo de producto local a estar en muchos de los productos, como la papa, en un 60%, las hortalizas en un 72%, los huevos en un 82% o la fruta de temporada en un 50%", destacó el representante insular.

Cuatro años en pausa

La Feria Regional de Vino, Queso y Miel de Canarias celebra este fin de semana su primer encuentro desde 2019. «Es un espacio extraordinario para que los productores vendan directamente y por lo tanto se cumpla uno de los principales objetivos de la soberanía alimentaria, que es pagar un precio justo por el producto, libre de intermediarios que encarezcan la producción», resaltó en la presentación del acto Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria. La jornada de ayer también contó con catas, un espectáculo culinario y uno musical con Alberto González y Abraham Ramos Chodo. Hoy continuará con la actuación de la agrupación Asentaos y Tumbaos y nuevas catas. | B.M.

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