Mogán.

Mogán prepara la transformación del barranco en una gran zona verde

El programa de modernización de Playa de Mogán contempla un ascensor panorámico

Simulación de cómo quedaría el plan de integración paisajística y renaturalización del barranco de la playa de Mogán | | LP/DLP

Simulación de cómo quedaría el plan de integración paisajística y renaturalización del barranco de la playa de Mogán | | LP/DLP / Javier Bolaños

Javier Bolaños

Javier Bolaños

El Gobierno de Canarias saca a información pública el Segundo Plan de Modernización de Playa de Mogán, que contempla como uno de los hitos la transformación del barranco como un eje verde-azul, que conlleva cubrir parte del cauce y la colocación de pasarelas para pasar a ambos lados, y propone la reunificación de pequeñas parcelas turísticas para ofrecer «un producto turístico atractivo y potente». El proyecto contempla un ascensor panorámico del puerto a Los Riscos, donde se prevé pequeños jardines y la mejora de la movilidad, y el uso comercial de las plantas bajas en algunos de los recorridos, para garantizar su atractivo; además de contemplar un gran área verde al norte de la carretera (GC-500), que sirva de entrada natural, guaguas eléctricas para facilitar la movilidad interior, aparcamientos y sistemas de alquiler de bicicletas, y equipamientos para coches eléctricos.

«Impulsar la renovación y modernización de la urbanización turística, que mejore la imagen del núcleo turístico consolidado y que permita lograr unos servicios públicos satisfactorios». Este es el principal objetivo del documento presentado por el Gobierno regional, que ahora se somete a la participación pública, y que da respuesta a la anulación del anterior plan por el Tribunal Supremo.

La intervención se centra en el espacio que ocupa la cuenca sur del Barranco de Mogán, desde la costa hasta la GC-1, quedando incluida en la zona turística litoral del Sur, a excepción de parte de las laderas este y oeste del barranco, incluidas en el mismo para su análisis ambiental por la fuerte presencia paisajística.

El modelo de ordenación establece un uso alternativo de equipamiento turístico complementario (recreativo y comunitario) para aquellas parcelas que, por su localización a una distancia superior a 1.000 metros de la playa o por sus pequeñas dimensiones, son consideradas poco competitivas. Para ello se propone firman convenios de sustitución por otros usos, así como su traslado.

Con el objetivo de convertir el barranco en el eje verde-azul vertebrador se contempla la colocación de pasarelas peatonales en los márgenes del barranco y su acondicionamiento paisajístico, junto con el espacio libre aledaño, que se complementa con la renaturalización de la calle La Maleza, que se reconvertirá en un confortable viario enmarcado por nuevos espacios libres que culminan en el Centro Comercial Plaza Mogán.

El barranco de Mogán será cubierto en puntos concretos para permitir la conexión viaria y principalmente peatonal.

Una de las medidas puestas sobre la mesa es la unión de pequeñas parcelas turísticas inferiores a 1.500 metros cuadrados en la zona, para dar cabida al desarrollo de «un producto turístico atractivo y potente».

En el casco antiguo de Los Riscos se ha diseñado un paseo junto a la franja de recuperación integral de la tabaiba dulce y el sistema de comunicación vertical, con una pasarela accesible. Unido a ello se prevé potenciar el mirador como espacio libre. Y, ante la desconexión con la zona del puerto y la zona alta, se recoge una conexión vertical mediante un ascensor panorámico. Para embellecer la zona, se han diseñado pequeños jardines y huertos, y el uso compatible comercial en la planta baja de las edificaciones de determinados recorridos, para impulsar el lugar.

El plan de movilidad sugiere un pequeño transporte interior sostenible para la zona, y aparcamientos y equipamientos para bicis y vehículos eléctricos.

Ciudad vacacional verde y unida

El reto es la renaturalización del tramo del barranco de Mogán hasta la playa para crear un ‘eje verde-azul’, que enmarca el camino al mar y vertebrar la ciudad turística. Para ello, el hito central es deshacer la fractura espacial generada que existe ahora. A su vez este espacio se convierte en la entrada al nuevo Parque Urbano de la Avenida de las Artes y potencia la unión de la zona residencial y turística, ya que genera una continuidad física de este espacio libre tanto en sentido longitudinal como transversal, y conecta de forma directa el eje de infraestructura verde-azul y el eje dinámico y sostenible. La zona media del núcleo cobra una relevancia especial, por la intención de transformar este enclave en la puerta de entrada la zona turística, que transporte a la imagen de antaño en la que el verde gozó de gran presencia. | J. B.