Pérez reivindica la recuperación del yacimiento del lado norte de la Catedral

El historiador critica el abandono en que se encuentran los vestigios prehispánicos

José Miguel Pérez

José Miguel Pérez / Andrés Cruz

«Mañana, 24 de junio, esta ciudad celebra la fecha en la que una expedición enviada por decisión real trajo desde la Península hasta La Isleta a las primeras gentes que vinieron a conquistar definitivamente esta isla. Fue el inicio de la fundación de nuestra ciudad asentada inicialmente en el campamento del Real de Las Palmas».

Con estas palabras que rememoraron los primeros pasos de la conquista que dio lugar a la fundación de la ciudad de Las Palmas comenzó su intervención el historiador y exvicepresidente del Gobierno canario, José Miguel Pérez, uno de los galardonados con la distinción de Hijo Predilecto, que fue además el encargado de leer el discurso de agradecimiento en nombre de los 25 personalidades y entidades premiadas con las distinciones.

El profesor aprovechó su intervención para llamar la atención sobre el olvido en el que se encuentran muchos vestigios de la historia prehispánica, al tiempo que lamentó el abandono de muchos yacimientos en la ciudad, cuya recuperación reivindicó.

A su juicio, es prioritario recuperar y dar a conocer el yacimiento situado en el lado norte de la Catedral de Las Palmas, donde se encontraron restos de antiguas construcciones, como el antiguo Hospital de San Martín, y numerosos restos óseos, durante las excavaciones que se llevaron a cabo a principios de siglo.

El Hijo Predilecto de Las Palmas de Gran Canaria consideró que la notoriedad de la fecha de la celebración de la conquista de la isla por parte de los castellanos, que duró cinco largos años, contrasta con la ausencia de efemérides para recordar a los habitantes prehispánicos de esta isla, pese a que «la historia de esta isla no empezó en el siglo XV». Empezó bastante antes.

«Aquellos habitantes propios del neolítico habían llegado varios siglos atrás. ¿Tenemos alguna fecha para celebrarlo? Pues ni día, ni mes, ni año. Incluso hay polémica entre los prehistoriadores en torno a los siglos en que llegaron aquellos primeros habitantes insulares», señaló.

José Miguel Pérez criticó el abandono en que se encuentran yacimientos aborígenes como la Cueva de Los Canarios, en La Isleta, que propicia que sean ocupados por personas.

Al respecto señaló que la presencia de los militares en La Isleta ha propiciado la conservación del yacimiento de Montaña Quemada, en el que un equipo de arqueólogos y geólogos encontraron un lugar «donde los aborígenes extraían el material necesario para la construcción de utensilios como los molinos de mano».

«¿Qué hubiera ocurrido», se preguntó, «si desde finales del siglo XIX, tal área no hubiese tenido esa condición militar... Es muy probable que los restos y vestigios que se han hallado jamás se encontrasen porque ¿quién iba a pensar que aquellas piedras eran tan importantes para el conocimiento del pasado de nuestra ciudad? Gratitud muy especial a aquellos militares que en nuestro siglo colaboraron para tales hallazgos».

Restos del Metropole

El que fuera también presidente del Cabildo, evocó por otro lado el hallazgo en 1989, justo al lado de la piscina del Metropole, de unos restos que inicialmente se pensó que pertenecían a víctimas de la guerra civil española y después se consideró que formaron parte de un lazareto que se estableció en la zona.

Recordó que los estudios radiocarbónicos dataron los restos en el siglo XV y lamentó que ninguna institución se haya preocupado de investigar un yacimiento de tanta importancia, pues una vez comprobada la fecha a la que pertenecían los esqueletos, se reanudaron las obras que motivaron el hallazgo.

«No hay ninguna efeméride para recordar a los habitantes prehispánicos»

«Ejemplos como los señalados», destacó, «hay otros muchos y de muy diversa importancia no solo para la historia de nuestra ciudad sino para otros territorios más alejados desde donde provinieron acontecimientos o hacia los que se gestaron aquí y repercutieron en aquellos otros lugares».

Recuperar los vestigios

Añadió que «afortunadamente, queda mucho que investigar y destapar» de esa historia y esos vestigios que tienen mucho que decir sobre cómo fueron sus auténticos protagonistas. «Como muy bien nos lo contó el historiador tan estimado y hace pocos años fallecido, Josep Fontana, todos los seres humanos que vivieron cada tiempo y fueron dejándonos los vestigios de un formidable legado. Ahora es nuestro tiempo y a todos nosotros toca ahora el protagonismo de hacer la historia».

En palabras del historiador, hay «una prioridad» a la hora del rescate de los testigos del pasado, una tarea que se inició a principios de este siglo, cuando se empezaron a excavar los restos del solar situado al norte de la Catedral, en pleno núcleo fundacional de la ciudad.

«Afortunadamente queda mucho que investigar y destapar de nuestra historia»

«Son apenas mil metros cuadrados que encierran restos de la ciudad prácticamente desde aquel primer asentamiento del Real de Las Palmas hasta el siglo XVIII», dijo José Miguel Pérez, quien consideró que ahora es el momento idóneo para retomar la tarea de investigación, «sobre todo ahora que las tres instituciones concernidas, la Iglesia, el Ayuntamiento y el Cabildo, se han puesto de acuerdo para que pueda hacerse realidad de forma rápida».

Para el especialista, «es una prioridad» recuperar el yacimiento, porque «en tan poco espacio podemos contemplar algunos restos de aquellos tres siglos. La idea es sacarlo a la luz».

«Hay mucho público que transita por Vegueta y solo ve en el lado norte de la Catedral las bases de unos muros antiguos y unos viejos letreros en los que ya casi ni se lee lo que en ellos se describe. Considero que dado que no es una obra cara, ni compleja, debemos apoyar la realización de un espacio visitable aunque se efectúen tales obras con toda la provisionalidad que se quiera, por si en el futuro se deciden mejores proyectos que el que ya se ha propuesto y acordado», subrayó.

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