Un pequeño jardín para Galdós

Dos jardineras con flores ornamentales, instaladas a distintas alturas, sustituirán el trozo de tierra con césped reseco que había hasta ahora en la Plaza de La Feria, justo delante del monumento al escritor Benito Pérez Galdós, en Las Palmas de Gran Canaria. Con la obra se intenta evitar los problemas de encharcamiento que sufría esta parte de la plaza cada vez que caían cuatro gotas o cuando se ponía en marcha el sistema de riego por aspersión.

La idea, informaron desde la Concejalía de Sostenibilidad y Parques y Jardines que dirige Gemma Martínez Soliño, es elegir una serie de plantas ornamentales que le den color a la plaza, invadida por el gris del pavimento y las palomas.

Seguro que a Galdós le encantarían los humildes y alegres geranios, esa «inmensa república», que «todo lo llena», que «se reproducen con facilidad maravillosa, y crecen como la plebe, duran como la ignorancia, y resisten fríos y soles como la pobreza», tal y como resaltaba el novelista en su obra En un jardín.

El espacio fue inicialmente una especie de estanque y formó parte del conjunto arquitectónico que resguarda la escultura de Galdós, que realizó en 1969 el escultor Pablo Serrano. La instalación del monumento, que fue inaugurado el 4 de enero de 1970 -coincidiendo con el 50 aniversario de su muerte-, cambió la cara a la plaza y levantó muchísimas expectativas entre la gente en torno a su uso como nuevo espacio para actuaciones teatrales y musicales. No en vano, la inauguración fue amenizada por Los Gofiones.

Pero fueron los chiquillos de la época los que se encargaron de hacer suya la nueva plaza desde el primer momento, explorando las inmensas posibilidades de la especie de muralla levantada tras un talud, desde el que se lanzaban con sus sancheskis y patines, unos vuelos temerarios que duraron hasta hace nada y que constituían todo un espectáculo para el resto de niños y niñas más pequeños y madres y padres que acudían a pasar las tardes.

Con el tiempo, el pequeño estanque fue cubierto con tierra y se plantó césped, pero la falta de drenaje del espacio comenzó a generar problemas. Con la lluvia se formaban pequeñas escorrentías que acababan con la plaza llena de charcos y de tierra, un problema que se repetía cada vez que se regaba el césped con los aspersores.

Lo primero que se ha hecho es retirar la tierra y una obra de drenaje en la losa de hormigón . También se ha instalado una plancha de acero cortén, bordeando todo el estanque, en cuyo hueco se colocará la primera jardinera, la que está situada a un nivel más bajo. En el interior se colocará la segunda jardinera.

Parques y Jardines espera que en varias semanas concluya la instalación del acero cortén, la colocación de la tierra y del sistema de riego y finalmente se procederá a la plantación. Se espera que todo esté listo antes de que acabe el año.

Además de reforma de la zona del estanque, se ha procedido a repasar la pintura de la frase de Galdós en la pared del monumento, pero el autor se ha dejado atrás varios acentos que, seguramente, se colocarán en su sitio antes de concluir la rehabilitación para que los que pasen por la plaza puedan disfrutar del extracto de un discurso de Galdós que comienza como sigue: «Así como de la noche nace el claro del día, de la opresión nace la libertad». «Imagen de la vida es la novela y el arte de componerla estriba en reproducir los caracteres humanos, las pasiones las debilidades... Todo esto sin olvidar que debe existir perfecto fiel de balanza entre la exactitud y la belleza de la reproducción».

Suscríbete para seguir leyendo