¿Cómo ayuda su método a dejar de fumar?
En mi libro enseño una sencilla técnica, gracias a la cual se puede modificar las principales vías de administración, que son la branquial y la pulmonar, por otra menos adictiva como es la oral, lo cual facilita el abandono definitivo del tabaco.
¿En cuánto tiempo un fumador puede dejar el tabaco?
La adicción al tabaco puede vencerse en una semana. Para ello, el fumador debe superar tres fases que duran dos días cada una. En definitiva, en una semana se logra el abandono definitivo del tabaco reduciendo progresivamente la cantidad de nicotina en sangre hasta conseguir neutralizar esa sensación placentera que producen los cigarrillos y su capacidad adictiva.
¿A quién beneficia más el Método Guerra?
A todos los fumadores, pero principalmente a los jóvenes, porque puede aplicarse desde las edades más tempranas, como la adolescencia, sin el efecto indeseable y secundario de los fármacos. También logra que la población fumadora adulta consiga dejar de fumar con sencillez y comodidad.
¿Es más fácil dejar de fumar poco a poco o hacerlo radicalmente?
Todo depende de la opción que elija el fumador, que es la que le va a conducir al éxito, por eso el médico siempre debe respetar la opción del paciente, pues con ello el camino del éxito está asegurado. Por eso, en los tratamientos para abandonar el tabaco el problema muchas veces radica fundamentalmente en que algunos profesionales ni permiten ni respetan que su paciente decida por sí mismo.
¿Todos los fumadores pueden dejar de fumar?
Antes de comenzar el tratamiento siempre realizamos una historia clínica completa del paciente, si tiene episodios de ansiedad o depresión, cuántos cigarrillos fuma al día. A quienes fuman más de treinta cigarrillos a diario no les recomiendo el cese radical, pero si ellos lo deciden debo respetar su decisión y si con el tiempo ellos se dan cuenta por sí mismos que se equivocaron, optarán por el cese gradual o progresivo. El doctor Otmar Carewicz, experto en tabaquismo, y autor de diversos libros para ayudar a dejar de fumar, afirma que los hijos de padres fumadores son más propensos a tener adicciones cuyo responsable sea la nicotina. Por lo tanto esta puede ser la causa de que algunos hijos nazcan con el gen alterado, es decir, que a estos fumadores les costaría más esfuerzo dejar de fumar que al que tiene una factor genético normal.
¿Cómo se puede compensar la ausencia de nicotina sin el síndrome de abstinencia?
El cuerpo humano es muy sabio y al verse privado de su dosis de nicotina, la busca en los alimentos. Algunos de ellos, como la berenjena, el pimiento, el tomate, la coliflor, la papa, son muy ricos en nicotina, incluso hay bebidas, como el té verde y el negro, que también lo son. Asimismo hay alimentos ricos en colina, que recupera las funciones cerebrales, como son el hígado vacuno, la yema de huevo, la coliflor, los lácteos, el pollo, el pescado y etc...
¿Qué alimentos recomienda para evitar la ansiedad?
El chocolate negro, las sardinas, las fresas, la lechuga, las nueces, el pan integral, los plátanos, las legumbres y los alimentos ricos en triptófano como el aguacate, el pavo, el pollo, la leche y etc...
¿A quiénes recomendaría el Método Guerra?
A todas aquellas personas que quieran dejar de fumar, ya sea progresiva o radicalmente, a los alérgicos o contrarios a la utilización de fármacos o de nicotina, a quienes padezcan crisis de ansiedad o depresión, a los fumadores que sean adictos a otras drogas, a quienes quieran evitar los efectos secundarios de los fármacos, a todos aquellos que hayan intentado dejar de fumar y tras fracasar estén convencidos de que no pueden lograrlo.
Su libro va acompañado de una ayuda complementaria en forma de cigarrillo para paliar el efecto mecánico de llevarlo a la boca, pero sin embargo está en contra del cigarrillo electrónico ¿Por qué?
No lo recomiendo y advierto a quienes vapean que están poniendo en serio peligro su salud. El cigarrillo electrónico produce neumonía lipoidea, que es el depósito de glicerol en el pulmón. El propilenglicol y el glicerol producen carcinogénicos como el formaldehido y cetoaldehido, incluso se han encontrado nitrosaminos en el cigarrillo electrónico. El vapeo altera el flujo sanguíneo, afectando al corazón, el cerebro y pulmones.
¿ Cuál es su motivación para haberse dedicado a luchar contra el tabaquismo durante más de treinta años ayudando a la población fumadora y formando a los profesionales sanitarios?
Todos estos años dedicados a la investigación han tenido como objetivo mejorar la salud de las personas. Este ha sido mi mayor legado, que pienso continuar.
¿A cuántas personas ha ayudado a dejar de fumar?
A muchas. He liberado de este hábito tan nocivo a tantas personas que he perdido la cuenta y seguiré haciéndolo, pero no mido mi éxito en términos cuantitativos, por eso, aunque con este libro tan sólo consiga que un fumador que quiera dejar el tabaco y no pueda hacerlo lo logre gracias mi ayuda me daré por satisfecho.
