La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) ha recibido una amplia respuesta por parte de sus grupos de investigación, a la convocatoria de un concurso público para financiar proyectos para hacer frente a la crisis del coronavirus. En total se han presentado 27 propuestas en áreas muy dispares, desde ciencias de la salud, biotecnología, educación, turismo, tecnologías, medicina veterinaria, economía, transporte y computación inteligente, entre otras. El objetivo de esta acción, impulsada con carácter de urgencia por el Vicerrectorado de Investigación, Innovación y Transferencia que dirige José Pablo Suárez, y financiada con 90.000 euros por la Fundación Caja Canarias y Fundación la Caixa, es hallar a la mayor brevedad posible medidas o acciones que ayuden a controlar o eliminar los efectos producidos por el virus.
La convocatoria, que se cerró esta semana con los 27 proyectos presentados, entra en fase de revisión por parte de una comisión científica de evaluación, encargada de seleccionar en torno a ocho proyectos, que recibirán 12.000 euros cada uno para su ejecución.
"La convocatoria la hicimos por la vía de urgencia para acortar todos los plazos, y mis previsiones son que se resuelva antes de agosto o a lo sumo a principios de septiembre, dado que el período de ejecución de los proyectos finaliza el 31 de marzo de 2021. Somos conscientes de que la dotación financiera es limitada para resolver todos los problemas de la Covid-19, pero supone una buena inyección tanto de personal como económica para pensar y repensar soluciones a la crisis por parte de nuestra Universidad", indicó el vicerrector de Investigación de la ULPGC, quien calificó de "sorprendente y muy positiva" la respuesta de los grupos de investigación de la ULPGC a esta iniciativa, "en tan poco tiempo".
Para participar en la misma, se propusieron desde el Vicerrectorado una serie de líneas de investigación dirigidas, en su conjunto, a contribuir a la contención de la propagación de la pandemia. En este sentido, se seleccionaron una serie de áreas temáticas prioritarias, entre las que se encuentran la creación de modelos de evaluación de inmunidad poblacional del Covid-19 ; diseños funcionales para aulas y espacios educativos que garanticen la seguridad de alumnos y trabajadores en la denominada "nueva normalidad"; y el diseño y desarrollo de equipos de protección individual o colectivos frente al coronavirus (mascarillas, trajes, gafas, pantallas, guantes...).
También se ha priorizado, entre otras áreas, las tecnologías y métodos para los tests, nuevas técnicas de diagnóstico y de monitorización hospitalaria; y los trabajos dirigidos a la detección y destrucción del virus, sistemas de desinfección masivos; y nuevos dispositivos de intervención o tratamiento del coronavirus; así como el desarrollo de terapias innovadoras, nuevas moléculas antivirales, antisépticos y desinfectantes frente al SARS-CoV-2.
Entre los proyectos presentados, en el ámbito de Ciencias de la Salud, figura un estudio sobre el nervio auditivo en los pacientes de Covid-19; el desarrollo de nuevas moléculas antivirales que eleven el arsenal terapéutico frente al coronavirus; así como una acción de vigilancia epidemiológica para detectar posibles cargas víricas del SARS-CoV-2 en aguas residuales; y la fabricación de equipos de protección y componentes de uso sanitario para el autoabastecimiento.
También optan a la financiación, estudios sobre el impacto socio-jurídico y económico de la enfermedad; y sobre la movilidad poblacional y los efectos de la misma en la pandemia. A ello se suma proyectos matemáticos, de simulación numérica de los modelos y parámetros epidemiológicos; así como de análisis de la evolución y propagación de la infección, o propuestas de métodos para detectar contactos entre los usuarios....
El ámbito turístico también está presente con acciones dirigidas a conocer cómo afecta la crisis sanitaria a las políticas de transporte y turismo, cómo deben cambiar y adaptarse las normativas a la nueva realidad; o nuevos patrones de comportamiento de los visitantes.
En arquitectura y patrimonio, se proponen acciones dirigidas a rediseñar el espacio urbano en la etapa postpandemia. Y en el educativo, los esfuerzos se encaminan a garantizar una enseñanza presencial con todas las garantías de seguridad para la comunidad educativa.
"En definitiva, hemos tenido una gran respuesta y muy diversa por parte de nuestro personal investigador, que pone evidencia el peso que tiene la ciencia a través de la Universidad para dar respuesta a crisis como la del Covid-19", concluyó José Pablo Suárez.
