Cumple 15 años el primer 'bebé medicamento'

Javier Mariscal nació para salvar a su hermano

Cumple 15 años el primer 'bebé medicamento

Cumple 15 años el primer 'bebé medicamento

Javier Mariscal, un nombre que resonó como esperanza, nació con una misión que cambiaría la vida de su familia para siempre. Hace 15 años, en España, vio la luz el primer 'bebé medicamento', también conocido como el hermano salvador. Este término se refiere a bebés concebidos mediante técnicas de reproducción asistida con el propósito de ser genéticamente compatibles con un hermano o hermana que sufre una enfermedad genética grave.

La historia de Javier y su hermano Andrés comenzó con el diagnóstico de una anemia congénita severa e incurable que afectaba profundamente la vida de Andrés. Sus padres, Soledad Puertas y Andrés Mariscal, nunca perdieron la esperanza de encontrar una solución para su hijo. La ciencia, en forma de técnicas de reproducción asistida, ofreció una luz al final del túnel.

Desde la Unidad de Genética, Reproducción y Medicina Fetal de Hospitales Universitarios Virgen del Rocío de Sevilla, se llevó a cabo un procedimiento asombroso. Utilizando el Diagnóstico Genético Preimplantacional (DGP), se seleccionó genéticamente un embrión sano para asegurar que el bebé por nacer, Javier, no heredaría la enfermedad de su hermano. Así, Javier vino al mundo el 12 de octubre de 2008, no solo como una bendición para sus padres, sino como la clave para la curación de su hermano mayor.

El Diagnóstico Genético Preimplantacional es una técnica que permite analizar embriones fecundados in vitro para eliminar los que contienen alteraciones genéticas transmitidas por enfermedades. Esta técnica brindó a la familia Mariscal Puertas la esperanza que tanto necesitaban. Después del nacimiento de Javier, los médicos trasplantaron las células madre de su cordón umbilical en la médula de Andrés, lo que resultó en un éxito sorprendente. A pesar de su corta edad, Javier se convirtió en un héroe para su familia. En poco tiempo, los médicos dieron de alta a Andrés, ya que el 95% de sus glóbulos rojos estaban libres de la enfermedad, una noticia que llenó de alegría a toda la familia.

A pesar de las críticas y desafíos, la familia Mariscal Puertas se convirtió en un ejemplo de cómo la ciencia y el amor pueden superar las barreras más difíciles. En España, la Ley sobre Técnicas de Reproducción Humana Asistida, que permite el diagnóstico preimplantacional con fines terapéuticos para terceros, se implementó en 2006 y ha abierto un camino de esperanza para muchas familias.

El caso de Javier y Andrés Mariscal no fue el único. Otros niños han nacido con la intención de salvar a sus hermanos, como el caso reciente de Diama, una niña que se sometió a un trasplante de células del cordón umbilical y médula ósea de su hermana genéticamente seleccionada para tratar la drepanocitosis hereditaria.

Alrededor de una tarta de cumpleaños, Javier soplará 15 velas, celebrando no solo su propia vida, sino también el regalo invaluable que dio a su hermano Andrés: una segunda oportunidad para vivir, unidos por un lazo más fuerte que la sangre.