La presencia de amianto en una parte del CULP modifica su plan de derribo

Han ejecutado el 60% de la demolición del área de aulas, biblioteca y salón de actos y, una vez culmine el resto, iniciarán la del módulo afectado por asbesto

Obras de derribo del edificio del antiguo Colegio Universitario de Las Palmas para ampliar el Hospital Insular.

Obras de derribo del edificio del antiguo Colegio Universitario de Las Palmas para ampliar el Hospital Insular. / Juan Castro

María Jesús Hernández

María Jesús Hernández

El plan de derribo del edificio del antiguo Colegio Universitario de Las Palmas (CULP) iniciadas el pasado 16 de octubre para destinar esa parcela a la ampliación del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria, ha sido modificado tras detectarse la presencia de amianto (asbesto) en uno de los dos módulos del inmueble, que fue construido en 1972. Hasta el momento, se ha ejecutado el 60% de la demolición de uno de los edificios en el que se encontraban las aulas de docencia, la biblioteca y el salón de actos del CULP, así como la zona central de accesos, y una vez finalice esta actuación se continuará con los trabajos en la parte restante en la que se encontraba el área de laboratorios y despachos, que es el módulo afectado por la presencia de amianto y que conlleva una actuación específica.

Años en desuso

El derribo del CULP, que llevaba años en desuso, fue adjudicado a la empresa Hercal Diggers S.L. tras una licitación abierta, por 1.594.068,49 euros, con el objetivo de destinar la parcela resultante, de 10.724 metros cuadrados, a la construcción de un nuevo edificio de ampliación del Hospital Universitario Insular de Gran Canaria, para disponer del espacio necesario para atender la demanda asistencial que cubre el citado centro hospitalario. La actuación, que arrancó el pasado octubre, con un plazo de seis meses, consiste en la demolición completa del edificio y de toda la zona exterior de las construcciones existentes en la parcela, desde aceras peatonales, graderío y escultura exterior realizada en hormigón, hasta el desmantelamiento de la central transformadora que se encuentra en su interior por parte de la empresa titular de la misma.

Las obras comenzaron el 16 de octubre, tras disponer del Plan de Seguridad y Salud de la Obra y los análisis de algunos materiales existentes en el inmueble a efectos de detectar la posible existencia de amianto.

Análisis de los materiales

Según la información facilitada por la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, una vez recibidos los resultados de los análisis de los materiales, se informó de la existencia de dos tipos, que sí tienen en su composición amianto y no estaban previstos en el proyecto inicial, lo que obligó a la realización de un nuevo plan de trabajo específico para su retirada, que fue presentado con las subsanaciones correspondientes el 29 de noviembre de 2023.

El 20 de diciembre de 2023 se recibió la aprobación del citado plan específico, por parte de la autoridad laboral (ICASEL), y se procedió a la modificado del proyecto que ya recoge la ejecución de las citadas unidades no previstas en el plan inicial.

Actualmente están a la espera de la recepción de los medios materiales para poder realizar los trabajos de desamiantado por parte de la empresa Ferrolezma, que requieren de unas instalaciones y de los elementos de protección especial que se contemplan en el plan de trabajo específico.

Asimismo, se está llevando a cabo la gestión con el centro de transformación, cuya titularidad es de la empresa Endesa, que será el encargado de la retirada de los materiales que contengan amianto, labor que se realizará en paralelo con la finalización de la obra, prevista para el próximo mayo.

Actualmente están a la espera de los materiales para realizar los trabajos de desamiantado

Por su parte, la Dirección General de Programas Asistenciales y la Gerencia del Complejo Hospitalario Universitario Insular Materno Infantil, trabajan actualmente en el plan funcional que contempla los servicios previstos para la construcción del nuevo edificio, que servirá de base para licitar la redacción del proyecto de construcción de la ampliación del Insular.

Cinco plantas

Dicha ampliación, cuyo proceso comenzará una vez que concluya la demolición del CULP, está ideada como un edificio de cinco plantas de unos 5.000 metros cuadrados cada una, aprovechando al máximo la superficie de la parcela, en la que también se llevará a cabo una nueva red de viales que permita dirigir los flujos de vehículos y personas a las distintas dependencias con el mínimo de interferencias, teniendo en cuenta las cotas de accesos y el desarrollo de la galería subterránea que comunica los distintos edificios. Cabe recordar que, por su localización, el futuro edificio permitirá una conexión con el edificio principal del Hospital Insular en diferentes niveles, lo que garantizaría una continuidad funcional de ambos inmuebles.

En mayo prevén finalizar las obras e iniciar la fase para edificar la ampliación del Hospital Insular

Entre los servicios que albergarán las futuras instalaciones, edificadas en la parcela del antiguo CULP, figura la unidad de apoyo a la investigación, el servicio de farmacia, la ampliación de las consultas externas y sus gabinetes de apoyo, el nuevo servicio de urgencias de adultos, el área de cirugía mayor ambulatoria, una unidad de hospitalización de media estancia que contará con 40 camas, y los laboratorios clínicos que incluyen un área de toma de muestras clínicas, además de un área de inmunología, así como los vestuarios generales y las áreas de logística.

Cuatro décadas de docencia

El edificio que albergará la ampliación del Hospital Universitario Insular fue construido por el Cabildo de Gran Canaria en 1972 y en septiembre de 1973 se creó el Colegio Universitario de Las Palmas (CULP), en una superficie de 6.160 metros cuadrados. Durante 43 años albergó los estudios de Medicina, Enfermería, Derecho, Filología y Geografía e Historia, e incluso, de forma temporal, allí se impartió clases de las titulaciones de Informática y de Ciencias del Mar de la entonces Universidad Politécnica. También contó con instalaciones de laboratorios y despachos utilizados conjuntamente con el Hospital Insular. En 2019 se cerró definitivamente a la docencia tras abrirse en 2016 las instalaciones de Ciencias de la Salud en San José -ese año albergó el rodaje de la película El Titán-. Desde entonces estaba prácticamente en desuso. | M. J. H.