Tribunales

Una banda a juicio por utilizar guaguas para introducir droga en Canarias

Los agentes incautaron dos kilos de cocaína y 56 de hachís en un vehículo que transportaba a un grupo de visitantes al Loro Parque

Ciudad de la Justicia de Las Palmas.

Ciudad de la Justicia de Las Palmas. / Juan Castro

Benyara Machinea

Benyara Machinea

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas juzga a partir de este jueves a 31 personas acusadas de formar parte de una banda criminal que distribuía cocaína y hachís desde África, Colombia y la Península Ibérica hasta Canarias. Las sustancias estupefacientes incautadas iban ocultas en guaguas de transporte de pasajeros y en jaulas para trasladar a gallos de pelea. La Fiscalía les imputa presuntos delitos contra la salud pública y pide penas que van desde cuatro hasta 16 años de prisión, con multas de entre cuatro y diez millones de euros. 

A raíz de las investigaciones de la Unidad de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) de Las Palmas se tuvo conocimiento de que desde el año 2016 el acusado J. C. H. presuntamente lideraba un grupo organizado que se dedicaba a la distribución de cocaína, con personas de su confianza en las Islas para recoger el dinero y organizar la llegada de estupefacientes. Por auto judicial del 25 de septiembre de 2016 se autorizó la entrada y registro de la habitación del sur de Gran Canaria en la que se hospedaban dos de sus miembros y se hallaron 469.250 euros en efectivo que supuestamente procedía del tráfico de droga.

El Ministerio Fiscal sostiene que, a principios de 2017, el grupo contactó con una organización de transportistas canarios liderada por Y. F. A. y E. B. J. con el objetivo de establecer un flujo continuo de suministro de cocaína en Gran Canaria. Los transportistas contaban con una empresa que se dedicaba, de forma lícita, al transporte de pasajeros y turistas dentro del Archipiélago, denominada M Bus y más adelante renombrada como H Bus. Según la acusación, "en las guaguas de dichas empresas se transportaba la cocaína" y las cocheras en las que estacionaban, ubicadas en una nave del Polígono Industrial de Arinaga, "eran utilizadas como centro neurálgico logístico".

La Fiscalía mantiene que hay 31 personas implicadas en el tráfico de sustancias estupefacientes

Los agentes siguieron de cerca un viaje de la compañía a Tenerife, en el que tres de los acusados trasladaban a un grupo de turistas en una de sus guaguas para ir de visita al Loro Parque. Los transportistas salieron el 31 de agosto de 2017 y se reunieron ese mismo día con B. S. A., que supuestamente les entregó dos kilos de cocaína y 56 kilos de hachís que cargaron en el vehículo para volver a Gran Canaria y distribuirla en la Isla, pero fue incautada antes de llegar a su destino y tasada en 119.956 euros.

El escrito de acusación sostiene que, desde agosto de 2017, "se produjeron contactos para que el grupo introdujera cocaína por el aeropuerto de Gran Canaria" y se designaron como encargados de esta tarea a J. R. M. y a F. J. L. Sin embargo, el seis de diciembre, sobre las 22.00 horas, los agentes de la policía interceptaron la llegada de una jaula artesanal con tres gallos de pelea que ocultaba un kilo de cocaína, con un valor en el mercado de 34.777 euros. El pasajero que la portaba venía de un vuelo de Jerez de la Frontera con escala en Madrid y en tierra le esperaba otro de los acusados.

132 kilos de cocaína

En diciembre de 2017, la organización criminal habría acordado con los transportistas canarios la llegada de una importante cantidad de cocaína. El Ministerio Fiscal mantiene que Y. F. A. ordenó a M. S. M., dueño de H Bus, que comenzara las gestiones para comprar una guagua a nombre de la compañía que sirviera para distribuir el cargamento esperado. Dejaron el vehículo estacionado en la provincia de Málaga con el supuesto propósito de que el grupo introdujera 132 kilos de cocaína oculta en el depósito de combustible y después lo embarcaron con destino a Gran Canaria, pero fue retenido durante una parada en Tenerife. Los agentes encontraron la carga en el depósito del vehículo, con un valor en el mercado de 4,5 millones.

Mientras tanto, Y. F. A. y E. B. J. presuntamente estarían planeando la introducción de una gran partida de hachís procedente de Marruecos. En la madrugada del 25 al 26 de enero de 2018, llegó a la playa cercana al barranco de Martorrel, en Sardina del Norte (Gáldar), una lancha neumática con 476 fardos, que resultaron contener 1.389 euros de hachís, con un valor en el mercado de 2,5 millones de euros. Según la Fiscalía, la intención era distribuir las sustancias en Gran Canaria y habrían colaborado una decena de personas con coches todoterreno con las luces apagadas para vigilar que tuviera éxito el operativo.