La Fortaleza a vista de atlas

El último refugio conocido de los aborígenes, La Fortaleza de Santa Lucía de Tirajana, ha sido recogido en un atlas visual en el que se refleja su singular historia de 1.200 años. Bajo el título, La Fortaleza: un espacio contra el olvido, la publicación refleja su excepcionalidad y complejidad. Este yacimiento, situado en el interior del municipio en la caldera de Tirajana, es el recuerdo y el mejor ejemplo de poblado fortificado de la antigua sociedad indígena de la Isla.

Desde el siglo V, fecha de la datación de los primeros enterramientos, La Fortaleza fue empleada como lugar de asentamiento hasta el siglo XV, y en 1485 quedó abandonada como refugio tras la invasión castellana. El conjunto fue declarado como Bien de Interés Cultural (BIC) en 2017 y su composición, a lo largo de sus 120 hectáreas, está formado por tres roques: La Fortaleza Grande, La Fortaleza Chica y Titana.

La Fortaleza amplía el museo y aspira a convertirse en parque arqueológico

De ellos destaca La Fortaleza Grande, que está organizada en diferentes niveles comunicados entre sí por pasos y caminos.

La publicación, que cuenta con una tirada inicial de 2.500 ejemplares, relata, a través de más de un centenar de imágenes, la historia de un yacimiento milenario, y da cuenta de los diversos materiales recuperados en las investigaciones arqueológicas más recientes, a través de los que se muestran de forma didáctica y divulgativa los resultados de los trabajos arqueológicos llevados a cabo en el yacimiento durante los últimos años.

El arqueólogo y gerente de Tibicena, Marco Moreno Benítez, es el editor y promotor detrás de la publicación de este atlas. Moreno es un gran experto en la materia, ya que lleva desde el año 2011 estudiando y recabando información sobre la estructura.

Relata el arqueólogo que se dio cuenta de la grandeza histórica que posee este emplazamiento desde el primer momento que vio el yacimiento arqueológico, y confiesa que sintió «pena porque una cosa tan espectacular como esta se pueda quedar en el olvido». Además, añade que la elaboración del libro no tuvo una duración larga: «A estas alturas del año, por Navidad, ya estaba escrito el primer borrador».

Para generar una interacción con el lector y que se sienta partícipe del relato, el libro está dividido en dos partes. En la primera, se realiza una descripción de lo que es La Fortaleza en sí y la segunda parte trata sobre todo lo relacionado con las especificidades de la estructura, analizando las distintas cerámicas halladas y también las pintaderas.

Este libro tiene como objetivo mostrar un relato de los restos materiales que se pueden encontrar en la actualidad con el objetivo de recuperar los 1.200 años de historia al presente para que la sociedad grancanaria se reencuentre con su pasado, y como asegura su creador, para «que sea accesible para un público no especializado». Dentro del más de centenar de imágenes que se incluyen en la obra aparecen fotografías de fichas, empleadas como juego por los aborígenes. «Estas representaciones sirven para humanizar al lector», afirmó el autor.

La monografía presenta miles de historias jamás contadas antes sobre este yacimiento, que sigue escondiendo secretos. Además, incluye imágenes inéditas y muestra un contenido novedoso que no había sido publicado anteriormente. Marco Moreno confiesa que su intención es que «a partir del ambiente, de sus estructuras y sus peculiaridades se descubran miles de anécdotas que permitan al público familiarizarse con su historia».

Retos para el futuro

El libro ofrece un completo resumen de los trabajos arqueológicos iniciados en la zona por parte de la empresa Tibicena. Arqueología y Patrimonio, que gestiona el museo de La Fortaleza, y todas las expediciones con el objetivo de que sea accesible para todas las personas interesadas. Estas actividades se suceden desde hace varios años y aún no se ha terminado con la zona. De hecho, la publicación incluye algunos de los hallazgos recogidos durante las últimas excavaciones. Moreno confirma que falta mucho trabajo por hacer y espera que para un intervalo entre los próximos 10 o 15 años las obras hayan finalizado.

El autor de este atlas visual no pone techo al potencial que se puede extraer del yacimiento arqueológico, puesto que espera que con los futuros descubrimientos de las excavaciones se prepare una segunda parte mucho más extensa, y explicativa sobre La Fortaleza. Según las estimaciones de Moreno, será para los años 2025 o 2026 cuando estará preparada la nueva publicación que recogerá todas las nuevas teorías, y la evolución que ha experimentado la estructura con el paso del tiempo.

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