El COP Las Palmas celebra el Día Mundial de los Abuelos con Centro Sociosanitario Queen Victoria

 “Ser abuelos es una maravilla, la mayor alegría que te pueden dar tus hijos”, reconocen los residentes y usuarios, y desde el Colegio destacan “su gran valor como transmisores de amor, tranquilidad, escucha, consejo y sabiduría”

El COP Las Palmas celebra el Día Mundial de los Abuelo

El COP Las Palmas celebra el Día Mundial de los Abuelo / ALB

Mañana, 26 de julio, se celebra el Día Mundial de los Abuelos y, con motivo de esta entrañable fecha, desde el Colegio Oficial de la Psicología de Las Palmas han querido organizar un evento especial con el que poner en valor la gran relevancia de esta figura en la sociedad. De esta forma, el Grupo de Psicogerontología del Área de Intervención Social del Colegio ha llevado a cabo un bonito encuentro con las personas mayores del Centro Sociosanitario Queen Victoria de Las Palmas de Gran Canaria.

Con este coloquio, en el que participaron la vicedecana del COPLP y responsable del Área de Intervención Social, María del Pino del Rosario Armas, y la psicóloga del Centro, Macarena Santana Piña; se quiso realizar un análisis con debate acerca de la figura de los abuelos y abuelas tanto antes, como ahora. “Es importante tener en cuenta la figura de gran valor que tienen los mayores en nuestra sociedad en cuanto a transmisores de amor, tranquilidad, escucha, consejo y sabiduría que sirven de gran apoyo en los procesos de crecimiento de nuestra sociedad”, recalcó la vicedecana del COP Las Palmas.

El COP Las Palmas celebra el Día Mundial de los Abuelo

El COP Las Palmas celebra el Día Mundial de los Abuelo

“Es una relación con beneficios en las dos direcciones, tanto de los abuelos hacia los nietos, en cuanto al vínculo del cariño, de la comprensión y de la transmisión de las tradiciones, como al revés, con un gran aporte a la salud emocional de los mayores, pues les hace sentirse más felices y en compañía, además de ser más proactivos en el grupo familiar”, agregó María del Pino del Rosario.

Durante el coloquio, los residentes y usuarios del Queen Victoria escucharon atentamente las palabras de las psicólogas y quisieron compartir sus experiencias como abuelos, pero también como nietos durante su infancia y juventud. Así, una de las presentes aseveró que “ser abuela es una maravilla, mi nieto son mis ojos. Ha sido la mayor alegría que me ha dado mi hija”. Algo con lo que se mostraron de acuerdo los presentes. “Ser abuela es una grandeza, la mayor alegría que me dio mi hija fue cuando me dijo que estaba embarazada”, apuntó otra de las residentes. Y un tercero, explicó que tiene “ocho nietos y es lo más bonito”. “Ser abuela no se puede explicar, me gusta serlo y estoy muy orgullosa de mis nietos”, compartió otra de las participantes en el coloquio.

Pero nuestros abuelos y abuelas también fueron niños y disfrutaron, a su vez, de esa especial relación abuelo-nieto. “Yo nací en casa con mis abuelos y me crié con ellos en Valleseco. Recuerdo que escuchaba la radio grande que había en casa, con mi abuelo, y como hacía tanto frío metía las piernas en una colchoneta. Esta sensación la recuerdo con mucha claridad”, rememoró uno de los presentes. Y otro explicó que su abuelo fue el primer maestro del Puerto de la Luz, además de organista. “Era el que me inspiraba respeto, el que hacía de todo y enseñaba; yo era muy feliz”, indicó.

El COP Las Palmas celebra el Día Mundial de los Abuelo

El COP Las Palmas celebra el Día Mundial de los Abuelo

Otra de las residentes recordó cómo su abuelo se ponía en el suelo a jugar con ella. “Solo tenía seis años, pero lo recuerdo perfectamente; es un recuerdo muy bonito, entrañable y tierno, no se puede olvidar”, apuntó, destacando que, entonces, “los abuelos estaban muy presentes en la vida familiar”. Buena prueba de ello fue el testimonio de otra de las presentes, quien aseveró que “antes había respeto con cariño”. “Cuando me iba a casar, fui a casa de mi abuelo para que me diera la bendición, le teníamos mucho respeto. Recuerdo que cuando llegué y me cogió de la cara para darme un beso en la frente se me saltaron las lágrimas”, relató.

Otro bonito testimonio fue el de M. J., quien explicó que ella vivió con sus abuelos de pequeña. “A mi abuela le encantaba cocinar. Tenía una cabra por eso me encanta la leche de cabra. Tenía solo seis años cuando murió, pero lo recuerdo como si fuera ayer. Es un cariño tan bonito, que me gustaría que estuviese aquí; esas vivencias con ella ya no las he vuelto a vivir”, aseguró. “Mi abuelo era mi favorito, siempre estaba con él y me contaba cuentos”, se animó a compartir otra de las presentes, quien explicó que perdió a su madre con solo cinco años y fue su abuelo quien la enseñó a conducir. “¡Imagínese una niña conduciendo!”, rememoró, con cariño.

Desde el COP Las Palmas quieren agradecer al Queen Victoria, sus trabajadores, residentes y usuarios por tan grata experiencia. Y aprovechan para animar a valorar, respetar y tratar con cariño a nuestros abuelos y abuelas no solo en su día, sino durante todo el año.