El Puerto de Las Palmas prepara una nueva ampliación del muelle Reina Sofía

El objetivo es que crezca en 200 metros para mejorar la línea de atraque y las operaciones en el muelle Cristóbal Colón, donde Opcsa tiene previsto atracar megabuques de 24.000 contenedores con sus nuevas grúas

También servirá para pacificar más las aguas y facilitar futuras actuaciones como la ampliación del muelle Deportivo

Vista general del muelle Reina Sofía y el Puerto de Las Palmas.

Vista general del muelle Reina Sofía y el Puerto de Las Palmas. / LP / DLP


La ampliación del dique de La Esfinge, que da cobertura a la dársena de África en el muelle Nelson Mandela, no será la última gran obra exterior que acometa el Puerto de Las Palmas. Los técnicos de la Autoridad Portuaria trabajan en un nuevo proyecto para ampliar también el muelle Reina Sofía, una actuación que está llamada a convertirse en la «joya» del recinto capitalino, según explica su presidenta, Beatriz Calzada.

Hasta ahora existía en el sector la convicción de que la prolongación del Nelson Mandela sería la última expansión exterior del Puerto de Las Palmas, pero los técnicos trabajan en un nuevo proyecto para alargar el Reina Sofía otros 200 metros

Más allá de esa distancia, que supone rebasar el muro visual situado a la altura de la Biblioteca del Estado, parece inviable crecer más debido al gran calado existente, una profundidad que ronda los 50 metros y, por tanto, hace muy complicado rentabilizar la gran inversión necesaria para rentabilizar una obra de esa magnitud.

Esos 200 metros de muelle, sin embargo, sí parecen asumibles para hacer el futuro concurso público más atractivo a las empresas constructoras. La Autoridad Portuaria de Las Palmas (APLP), de hecho, trabaja ya en el proyecto para incorporarlo al plan de empresa del próximo año, con la finalidad de que Puertos del Estado autorice la actuación para convocar la licitación.

Crecimiento clave

La creación del dique Reina Sofía, con sus sucesivas ampliaciones para ganar línea de atraque en el muelle, ha sido clave para el crecimiento del Puerto de La Luz y de Las Palmas, sobre todo a finales de la década de los sesenta, periodo en el que el recinto se vio desbordado por un aumento del tráfico marítimo vinculado al bloqueo del Canal de Panamá

La última gran obra del Puerto de Las Palmas se corresponde con la segunda fase del Reina Sofía y es relativamente reciente: arrancó en agosto de 2019 y finalizó a principios del año pasado. Es, por tanto, un muelle nuevo, que ha servido para captar y especializarse en un tráfico marítimo distinto al habitual en Canarias, con grandes plataformas petrolíferas y barcos perforadores que ahora recalan aquí en busca de servicios. Esto es posible gracias a su calado de 25 metros.

Y es que esa cualidad de la profundidad, unida a la situación estratégica de La Luz, que se encuentra en medio de las principales zonas de extracción de gas y petróleo mundiales, ha permitido el crecimiento y la consolidación del sector de las reparaciones navales, con astilleros, talleres y consignatarias que se han instalado al principio del Reina Sofía para trabajar con esta potente industria de la perforación.

Es, además, uno de los pocos espacios dentro del puerto libre de concesiones, al menos en buena parte de sus dos kilómetros lineales de muelle, lo cual genera importantes beneficios al ser un lugar de atraque preferente para plataformas o barcos de gran tonelaje, por citar dos de los buques más frecuentes en la dársena exterior del puerto. Esto repercute en más tasas para la Autoridad Portuaria, que suele tener el recinto al límite de su capacidad, así como nuevas oportunidades de negocio para consignatarias, pequeños talleres, empresas de buceo y proveedores que operan en La Luz.

Empresas asentadas

Ese último tramo del Reina Sofía, de 400 metros, se hizo precisamente para las plataformas, que debido a su calado no podían llegar hasta los astilleros clásicos de Astican y de Zamakona. De ahí que se dieran nuevas concesiones para trabajar con esta industria al inicio del dique, asentándose también en esa franja empresas como Hidramar o Hamilton.

La nueva ampliación del Reina Sofía, además, servirá para pacificar aún más las aguas en la dársena exterior, lo cual mejorará las operativas del muelle Cristóbal Colón, que es donde está previsto el atraque de ‘megabuques’ de hasta 24.000 contenedores. 

La Autoridad Portuaria espera que estos grandes barcos comiencen a llegar el próximo año, una vez que se adapte el Cristóbal Colón y las grandes grúas de Opcsa empiecen a trabajar en la terminal de contenedores a pleno rendimiento. 

Asimismo se verá incrementado el abrigo del muelle Deportivo si se hace su ampliación.

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