Ni guaguas vacías ni un metro de distancia entre los pasajeros a pesar de que el Gobierno decretara el pasado viernes el estado de alarma y que desde ese día las salidas a la calle estén limitadas a situaciones excepcionales. Esa escena fue la que se vivió ayer a primera hora de la mañana en varías líneas de transporte público cuando los isleños que continúan acudiendo a su puesto de trabajo -excepción permitida por el decreto del estado de alarma- se encontraron con una gran afluencia de personas en su misma situación. En algunos horarios hay casi los mismos usuarios que un lunes cualquiera, pero con la diferencia de que tanto Guaguas Municipales como la empresa Global han reducido el servicio al 50%. Una medida que provoca que algunas líneas estén tan llenas que sea imposible mantener la distancia que recomienda las autoridades entre viajeros.

"Una situación histórica requiere de tiempo de adaptación", asegura Víctor Quintana, director general de Global. Las guaguas de esta compañía operan con el horario de días festivos exceptuando las líneas 18, 38, 101, 106, 107, 220 y 305, que mantienen el horario de siempre. Además se suspenden temporalmente las líneas 45 y 70, que llega desde la capital hasta Palmitos Park, y la línea 316, que conecta con el cementerio de San Lázaro. Quintana reconoce que ayer la afluencia de pasajeros "fue más elevada de lo que esperaban" pero asegura que ya se están ejecutando cambios en las líneas para reforzar aquellos trayectos con más demanda.

Por su parte, Guaguas Municipales hará lo propio e incrementará el servicio en aquellas líneas en las que sea necesario. Así lo asegura el equipo de comunicación de la empresa, que atribuye lo ocurrido a que existen "muchos ciudadanos que todavía no han asimilado la situación y por la incertidumbre han acudido a su trabajo cuando no deberían". La empresa opera de manera similar a un sábado durante el servicio diurno y mantiene el servicio nocturno como antes. Las líneas 10,18 y 19, operan con su horario normal, mientras que las líneas 48, 53 y 64, no circulan.

Las oficinas comerciales de Ciudad Alta y Obelisco quedarán cerradas y se mantendrá el servicio en las oficinas del Teatro y parque de Santa Catalina, en horario de 7:30 a 18:00 horas, mientras que la estación de guaguas de San Telmo tendrá apertura de 7:00 a 18:00 horas.

Además, desde mañana -a las 00:00 horas- se prohibe el pago directo del trayecto con dinero en efectivo para, así, evitar el contacto físico entre conductor y pasajero. Solo podrán usar las guaguas los ciudadanos que cuenten con cualquiera de los bonos de viaje disponibles. Esta medida ya se está implantando en todo el Archipiélago. En la isla de Lanzarote, hoy también será el último día en el que los conductores aceptarán dinero.

Los datos del fin de semana ya reflejan una disminución en el número de usuarios. Solo el domingo se registró un descenso del 82% en el número de viajeros de guaguas amarillas respecto a un domingo cualquiera. En el caso de Global, la caída el fin de semana fue del 75%. Quintana se apoya en estos datos para explicar que a pesar de la reducción del servicio, la separación entre pasajeros ya está asegurada en el 95% de los viajes. Y promete que la empresa está "atenta a ese 5% restante para corregir la situación".

Ambas compañías operan dentro de la legalidad. Han reducido su servicio en un 50%, han aumentado la limpieza de los vehículos y mantienen a sus trabajadores seguros con el uso de guantes y geles de hidroalcohol. Global, incluso, ha prohibido el uso de los dos primeros asientos de todas las filas para proteger en mayor medida a sus conductores. Ambas empresas, además, apelan a la responsabilidad social para respetar la distancia mínima dentro de los vehículos, y así mantener la seguridad de todos. aunque defiende que lo mejor es quedarse en casa.

Los usuarios de guaguas han sido los primeros en mostrar su descontento ante la situación. Muchos clientes lo han hecho a través de las redes sociales con imágenes y vídeos donde se puede apreciar que no se respeta la distancia de seguridad. Algunos de los pasajeros recriminan a las empresas la reducción de horario e incluso exigen que se reduzca el aforo en los viajes para que no se repita la situación. "No hay espacio y la guagua está llena, esto es una imprudencia", comenta uno de los afectados en Twitter.

A pesar de la reducción en el servicios, la plantilla de ambas compañías se mantiene igual. Desde Global han comenzado una campaña interna para que los trabajadores cojan vacaciones durante los próximos dos meses para que así la empresas no deba recurrir a un Expediente de regulación de empleo temporal (ERTE).

En lugar del transporte público, muchos canarios escogieron ayer el coche para realizar algunas de las actividades permitidas por el decreto. El primer día laboral en esta situación excepcional despertó también muchas dudas sobre el número de personas que puede ir en cada vehículo. Las autoridades confirman que los coches podrán circular con más de una persona siempre que todos los pasajeros se dirijan a los lugares de trabajo o a otras circunstancias que permita el decreto.