Jonathan Viera, ejemplo de amor y optimismo frente a la adversidad

Jonathan Viera, el todavía gran capitán de la UD Las Palmas, mostró su cara más optimista frente a la adversidad. El de la Feria publicó este martes en su perfil de Instagram un mensaje de fuerza y apoyo a su pareja, que está atravesando un momento delicado de salud. Viera le dedicó estas bonitas palabras: "Siempre así, con una sonrisa. Esa siempre fue nuestra mejor arma. Te amo".

Sin duda, un detalle lleno de amor del bueno. Y es que las últimas semanas no han sido las mejores para el el jugador grancanario.

Viera se encuentra en una situación complicada tanto en su vida personal como en su carrera profesional. Lo más probables es que los problemas personales hayan repercutido en el terreno de juego y en la situación que vive actualmente con el club después de haber decidido quedarse hace unos meses en lugar de irse a jugar al extranjero.

Hace unos días, su esposa, Estefanía Reyes, compartió en sus redes sociales una noticia impactante, revelando que le habían diagnosticado un tumor maligno en el útero. Esta noticia golpeó a la pareja, pero se ha informado que la operación de Estefanía fue exitosa y se detectó a tiempo.

Después del partido ante el Celta de Vigo

La situación de Viera se complicó cuando, después de marcar un gol y proporcionar una asistencia en un emocionante partido contra el Celta, se encontró sentado en el banquillo en el siguiente encuentro. Lo que le molestó aún más que la decisión de ser suplente fue la falta de comprensión o explicación dada por el club, especialmente teniendo en cuenta la delicada situación personal que su familia estaba atravesando.

Viera, un jugador muy respetado en la UD Las Palmas, no se mostró como se esperaba de un profesional en el campo ese día. Se negó a unirse a la charla del entrenador durante una pausa de hidratación en la segunda parte, lo que no concordó con su reputación y responsabilidad en el equipo.

La situación se complicó aún más cuando el capitán del equipo expresó su malestar y la entidad tuvo que tomar una decisión. El presidente del club eligió al entrenador García Pimienta, quien, a su vez, planteó la necesidad de mantener la estabilidad del vestuario. Como resultado, se decidió suspender un entrenamiento, y Viera no asistió a las prácticas en un intento por resolver la controversia.

La combinación de problemas personales y controversias en el campo ha generado una situación difícil para Jonathan Viera, quien busca equilibrar su carrera profesional con los desafíos personales que él y su familia enfrentan en este momento.