El sueño de la Champions debe esperar para el CV Hidramar Gran Canaria

De auténtica montaña rusa podría calificarse el encuentro entre checas y grancanarias, en el que los errores propios han marcado cada uno de los cinco sets disputados en favor de uno u otro equipo y que finalmente se ha decantado del bando local en un tie-break en el que el Kralovo Pole Brno ha estado más ordenado y acertado tanto en defensa como en ataque.

Con su derrota por 3-2 el CV Hidramar Gran Canaria dice adiós a sus opciones de disputar la fase de grupos de la Champions League y pasa a disputar a partir de ahora la segunda competición continental, la CEV European Cup.

Buena puesta en escena la que presentaba el Hidramar Gran Canaria sobre la pista del Mestska Hala Vadova de Brno, ante el anfitrión, el Kralovo Pole concedía demasiados errores propios que eran aprovechados por las grancanarias para poner tierra de por medio en el arranque del primer cuarto que colocaba a las isleñas con un 2-6 de parcial de salida.

El Olímpico fluía en ataque con Heloiza Pereira haciendo daño por las alas y Laura Suárez imponiendo su ley por el centro de la red, lo que hacía crecer la renta de las grancanarias obligando al técnico checo a parar el partido con un 8-13 en contra, en busca de soluciones.

Laura Suárez y Sulián Matienzo mantenían la ventaja en el marcador a pesar de la mejoría de las checas en la recta final del primer asalto que se lo terminaban adjudicando las discípulas de Marcos Dreyer por un contundente 16-25.

El Kralovo Pole mejoraba en el comienzo del segundo asalto, minimizando los errores propios que les habían condenado en el primero, mejorando su saque lo que complicaba la recepción del Hidramar Gran Canaria que sufría para construir su juego, lo que les permitía abrir una brecha de tres puntos a pesar de la eficacia en el bloqueo de la dupla formada por Laura Suárez y Lucre Castellano.

Al Olímpico se le apagaban las luces en ataque y los errores propios en ataque terminaban dando la victoria parcial a las locales que igualaban el choque con un 25-18.

La mejoría en el saque de las grancanarias les permitía poner tierra de por medio en el arranque del tercer acto. Abrían una brecha de tres puntos (2-5) que otorgaba a las pupilas de Marcos Dreyer la tranquilidad suficiente para comandar el electrónico obligando a las checas a arriesgar en el saque, lo que aumentaba sus errores, facilitando las cosas a las isleñas.

Heloiza Pereira mantenía a raya a las checas a base de sus potentes remates, encontrando la complicidad de Laura Suárez en la red para levantar un muro defensivo que las permitía llegar a la recta final del tercer acto con una renta de cuatro puntos (20-24).

Aviso de las locales

El Kralovo Pole se resistía a entregar la cuchara sin luchar y conseguía voltear el marcador para colocar el 25-24; momento elegido por Loane Motta Paes para cambiar la inercia negativa de las insulares en la recta final colocando tres pases vitales que servían al Olímpico para cerrar a su favor el tercer acto con un 25-27 y recuperar el mando del partido (1-2).

Marcos Dreyer recompensaba a la colocadora francesa y la mantenía en pista en el arranque del cuarto set que arrancaba con igualdad a ambos lados de la red, sin que ninguno de los dos equipos consiguiese poner tierra de por medio.

Los errores propios de las grancanarias les impedía abrir una brecha en el marcador y le daba esperanzas a las checas que jugaban más ordenadas en defensa para tomar el mando del set con un 13-8 en el marcador.

Marcos Dreyer ajustaba la defensa y le daba un nuevo impulso al juego de las amarillas que hacían la goma con las checas impidiendo el despegue de estas en el luminoso.

Heloiza Pereira se mantenía como la atacante más efectiva de las insulares que se acercaban en el marcador, pero sin conseguir bajar de la barrera de dos puntos, cediendo en el cuarto con un 25-23 que obligaba a decidir el choque en el quinto asalto (2-2).

Las amarillas trasladaban las malas sensaciones al arranque del asalto definitivo y encajaban un parcial de salida de 3-0.

El Olímpico no terminaba de encontrar su mejor juego llegándose al ecuador del último set con una desventaja de cinco puntos que ponía contra las cuerdas a las amarillas (8-5).

Los errores propios seguían siendo una losa para las grancanarias ante las checas que se mostraban mucho más ordenadas y concentradas, no dando opción a la remontada a las pupilas de Marcos Dreyer que se despedían de la competición tras claudicar en el quinto asalto por 15-9 (3-2).