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El Alcorac Henríquez, el único colegio de los Riscos que abrirá este curso

La pérdida de población y un rápido envejecimiento de la población aceleran el proceso | El último en cerrar sus puertas a infantil y primaria es el Guiniguada

CEIP Alcorac Henríquez, el único colegio público de los riscos que abrirá en el curso 22/23. José Carlos Guerra

El CEIP Alcorac Henríquez, en San Juan, será el único colegio de infantil y primaria que abrirá este curso en los Riscos de Las Palmas de Gran Canaria. La pérdida de población y un envejecimiento más rápido que en el resto del municipio capitalino han hecho mella en los centros educativos de estos cuatros barrios en menos de 15 años. El último en cerrar sus puertas al alumnado de infantil y primaria ha sido el CEIP Guiniguada, en San Nicolás, después de años de lucha vecinal para evitar lo que parecía inevitable. Este curso escolar 2022/23, que comienza el próximo viernes 9 de septiembre, ya no admitirá a niños y niñas de estas etapas educativas.

La continua pérdida de alumnado en estos centros los han ido llevando a cerrar sus puertas poco a poco. Desde la consejería de Educación del Gobierno canario señalan que el colegio de San Juan cuenta en estos momentos con 51 alumnos. Esto es, un tercio de los que tenía en 2014; aquel año estaban matriculados unos 160 escolares, un número que por ese entonces ya era inferior a la cantidad que llegó a tener cuando abrió sus puertas en 1987. Para evitar el cierre, los vecinos han reclamado incluir a niños y niñas de 0 a 3 años.

Este medio centenar de alumnos procedentes de San Juan y San José está repartido en cuatro grupos, cuando imparte contenidos para nueve cursos de infantil y primaria. En los años 80, en cambio, llegó a tener 14 grupos para EGB -incluía entonces séptimo y octavo, que hoy día corresponden con 1º y 2º de la ESO, por lo que se enseñan en institutos de educación secundaria- y cuatro unidades de infantil. El centro se inauguró con el nombre de Batería de San Juan, denominación que cambió en 2016 para homenajear a un antiguo alumno fallecido de manera prematura.

El centro educativo de San Juan cuenta con 51 alumnos, un tercio de los que tenía en 2014

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No obstante, el de San Juan todavía no alcanza la dramática situación -en cuanto a número de alumnos se refiere- que el colegio de San Nicolás llevaba años arrastrando. El centro tenía en este último curso 16 alumnos, según datos de Educación, por lo que era una escuela unitaria. Este tipo de centro es más habitual en pueblos pequeños del interior de las Islas, azotados por el éxodo rural y el envejecimiento poblacional; por lo que la situación del CEIP Guiniguada era un auténtica rareza al estar situado en un barrio en pleno centro de la capital.

Fuentes de la consejería de Educación recalcan que no han cerrado el centro, si no que se ha procedido a un «reconversión» del mismo. Este curso abrirá como centro de educación especial para el tránsito a la vida adulta con alumnos procedentes del Román Pérez Déniz, en Ciudad Jardín. «Lo que hacemos es adaptarlo a otras necesidades», precisan. Este cambio se haría «por falta de espacio» en el centro actual.

Lo cierto es que el número de matriculaciones en el Guiniguada en los últimos años se ha mantenido en mínimos: si en el curso 2018/19 fueron tres, en 2019/20 cuatro, en 2020/21 uno y en 2021/22 dos. Estos escasos números no compensaron la marcha de niños y niñas. Educación llevaba desde 2017 planeando cerrar el centro; por aquel entonces tenía 57 estudiantes, frente a los más de 400 que llegó a tener en sus inicios en los 80.

El Guiniguada acogerá este curso estudiantes del centro especial Román Pérez Déniz

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La asociación de vecinos Cofiris llevaba todos estos años «en lucha», recogiendo firmas y proponiendo la promoción de nuevas matriculaciones en el centro. Incluso, llegaron a solicitar que se pudiera impartir 1º de la ESO en el centro para evitar su cierre. Por último, varios representantes vecinales mantuvieron una reunión con la consejera, Manuela Armas, con la intención de revertir la medida, sin éxito. «No escuchó nuestras propuestas», señala Isreal Medina, presidente del colectivo; según este llevarán el caso al Diputado del Común y plantean además la inclusión de alumnado de 0 a 3 años. El centro que el Gobierno ha dado como alternativa preferente es el Nanda Cambres, en Arenales, a 2,4 kilómetros.

El Guiniguada se suma así al destino que anteriormente tuvieron el colegio de San Roque y el Carlos navarro Ruiz, en San José. El primero cerró sus puertas en 2008, tras el derrumbe de parte del techo de una clase, por lo que fue necesario reubicar a sus 130 alumnos. Paradójicamente, uno de los centros de referencia sugeridos por la consejería fue el de San Nicolás, dada su cercanía.

En el caso del Carlos Navarro Ruiz, abierto desde 1929, este se fusionó con el contiguo CEIP24 de junio en el curso 2012/13. Los alumnos de ambos centros, situados en el extremo sur del paseo de San José, pasarían finalmente al CEIP Alisios, en Zárate. Estos cambios coincidieron con los años más duros de recortes en educación durante la crisis financiera.

Fuga de vecinos

Lo cierto es que los Riscos no han parado de perder residentes en los últimos años. Según datos extraídos del diagnóstico participativo de Barrios Pendientes, entre 2010 y 2017 San Juan perdió un 6,3% de su población y San José el 7,2%. Una tendencia que se ha mantenido. A la fuga de vecinos hay que añadirle el envejecimiento de los que se quedan, el 10,1% de los residentes en San Roque son mayores de 74 años y en San Nicolás un 9,3%; la media de la capital es del 7,4%.

La presencia de centros concertados en Triana y Vegueta es otro factor que ha llevado al declive a estos colegios públicos en los Riscos capitalinos. En las propias faldas de San Juan está el San Juan Bosco, también conocido como Árbol Bonito. De hecho, en el barrio fundacional hay otros tres.

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