Carnaval Las Palmas de Gran Canaria

El Carnaval convierte el escenario de Santa Catalina en una gran discoteca

Las fiestas reviven la fiebre de la música disco en la noche neoyorquina con la alegoría ‘Studio 54’ . El montaje del tinglado carnavalero arranca el 7 de enero

Sergio  Macías, durante la presentación del futuro escenario del Carnaval Studio 54

Sergio Macías, durante la presentación del futuro escenario del Carnaval Studio 54 / Quique Curbelo

El Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria emprenderá el próximo año su particular viaje en el tiempo y aterrizará en el Studio 54, la mítica discoteca de Nueva York, que se convirtió en símbolo de la libertad sexual y la transgresión.

Cuando el templo de la música disco cerró sus puertas 33 meses después de su apertura se habló de su clausura como «el final de la Gomorra moderna». 

Y es aquel espíritu de fiesta y desenfreno que se adueñó de las noches neoyorquinas a finales de los años 70 del siglo pasado lo que quiere rescatar el Carnaval que arranca el próximo 10 de febrero y tomará la ciudad hasta el 5 de marzo, con la alegoría Studio 54.

El escenario de Santa Catalina, que comenzará a montarse justo el día después de Reyes, se convertirá en una gran discoteca a imagen y semejanza de Studio 54.

De izquierda a derecha, Sergio Macías, Inmaculada Medina e Israel Reyes, durante la presentación del futuro escenario del Carnaval.

De izquierda a derecha, Sergio Macías, Inmaculada Medina e Israel Reyes, durante la presentación del futuro escenario del Carnaval. / Quique Curbelo

El parque vuelve a convertirse en el epicentro de la fiesta carnavalera, que este año vuelve a ser la de siempre, sin las restricciones, cambios y divisiones de las últimas ediciones que provocó la pandemia. Y el parque volverá a recuperar el aforo de 4.500 personas.

Las obras de la metroguagua no afectarán a la celebración, sostuvo la concejala de Carnaval Inmaculada Medina, que este lunes presentó cómo será el escenario-discoteca que tomará Santa Catalina, junto al diseñador del mismo, Sergio Macías, y el director artístico de las fiestas, Israel Reyes.

El escenario acogerá, además de los concursos y galas, los conciertos musicales, ya que el parque Islas Canarias no se podrá utilizar por las obras. «El ayuntamiento», dijo Medina, «hará un parón en las obras de la metroguagua para que podamos celebrar la fiesta del Carnaval». 

Así las cosas, el tinglado carnavalero se tornará más impactante que nunca con 40 metros de ancho, 20 metros de longitud y 16 metros de altura en su punto más alto.

«Más que un escenario», explicó Macías, «será una gran discoteca, donde la iluminación y la tecnología tendrán un mayor protagonismo». Habrá dos grandes pantallas, una trasera de más de 350 metros cuadrados, en la que se recreará aquel ambiente de Studio 54 y otra curva, de diez metros de diámetro, que colgará del techo. Por primera vez el escenario tendrá un gran pórtico, sobre el que se desplegará un techo técnico.

Medina espera que las carnestolendas de 2023 cuesten tres millones de euros

Macías destacó la «imponente puerta elevable por la que accederán al escenario los participantes, artistas y figurantes, que estará coronada por una enorme bola de discoteca». Se trata, desveló, del mismo globo terráqueo utilizado en el Carnaval de La Tierra, reconvertido ahora en pelota de espejos.

Se han añadido además varios símbolos que representan al Studio 54 : una recreación de 12 metros de altura de la famosa media luna con cara de hombre, que estará rodeada, al igual que el cartel original, con una diadema de luces de neón que evocan los rayos del sol.

La boca

En el lado derecho del escenario a parecerá una boca gigante, de la cual saldrá una gran escalinata a modo de lengua, con la que se intenta recordar los espectáculos de cabaret que se escenificaron en el histórico edificio.

En palabras de Macías, la idea es «hacer un guiño a la libertad sexual, al transformismo y al erotismo» que caracterizó al Studio 54. Según Macías, «las piezas de escenografía tienen este año menor volumen que otros años y la tecnología adquiere un mayor protagonismo, lo que permite mayor rapidez a la hora de montarlo. Las salidas y entradas al escenario se mantienen y la única novedad es que las puertas van a ser un poquito más anchas y hacen que sea más cómoda la circulación a lo largo del escenario».

Lo más complicado, subrayó, es organizar a los equipos tan grandes de personas que participan en el montaje y que superan el centenar. Por su parte, Israel Reyes sostuvo que lo que se pretende mostrar con la escenografía es un viaje en el tiempo con un toque de actualidad, aprovechando al máximo lo que ofrece el espacio original, que tiene mucha historia».

La edila asegura que las obras de la metroguagua harán un «parón» para no afectar al jolgorio

«Este año por fin, tras varios año de pandemia vamos a poder celebrar el Carnaval tal y como lo conocemos, con nuestro escenario principal, nuestra discoteca en el parque Santa Catalina, que va a ser el epicentro del Carnaval. Nos va a hacer soñar, bailar y vibrar y volver a aquella época con el filtro actual», auguró Medina.

La edila espera contar con tres millones para el Carnaval discotequero, aunque ha pedido 2,5 millones. Salió al paso de las críticas por los más de cuatro millones que ha costado el Carnaval de este año, argumentando que se trata de una inversión que «genera un impacto económico en la ciudad de 39 a 40 millones, algo que repercute en el bienestar del municipio». 

Resaltó que en 2023 habrá Gran Cabalgata en condiciones, «no se repetirá el maratón de este año», que fue visto y no visto y muy criticado por los que se quedaron con la magua de bailar y disparatar más.

Medina espera que 2023 sea por fin el año en el que el Carnaval capitalino consiga el título de fiesta de interés turístico internacional. 

«Vayan preparando todos el brilli-brilli», dijo, que el Carnaval está a la vuelta de la esquina.

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