Triplete de delitos al volante en Las Palmas de Gran Canaria

Reza un dicho del refranero popular que el sentido común es el menos común de los sentidos. Eso al menos le sucedió a un conductor en Las Palmas de Gran Canaria el pasado fin de semana quien hizo caso omiso de todas las recomendaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT) y cogió el coche tras una noche de fiesta en la que había tomado demasiado alcohol y no sólo puso en peligro su vida, sino la del resto de usuarios de la vía.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado sábado, 20 de enero, cuando agentes de la Unidad Nocturna Especial (UNE) se vieron sorprendidos por un conductor que circulaba en dirección contraria en el barrio de Almatriche y casi choca, de manera frontal, contra el coche patrulla.

En ese momento se inició una persecución y el conductor infractor fue finalmente interceptado en Siete Palmas. Los efectivos policiales le realizaron la pertinente prueba de alcoholemia, el cual cuadriplicó la tasa máxima permitida por el alcoholímetro.

Un motorista circula más de 3 kilómetros de forma kamikaze en la Avenida Marítima

El conductor se enfrenta ahora a cargos como conducción temeraria, circular en dirección contraria y conducir bajo los efectos del alcohol.

Multas y sanciones

Las sanciones por este tipo de temeridades pueden oscilar entre los 200 y los 500 euros, dependiendo de su gravedad, y la retirada de 6 puntos del carnet.

En el caso del alcohol, superar una tasa de 0,25 mg/l y hasta 0,50 mg/l está sancionado con 500 euros de multa y la pérdida de cuatro puntos del permiso de conducir. Si el conductor supera los 0,50 mg de alcohol por litro de aire espirado, la multa asciende a 1.000 euros y la pérdida de seis puntos del carnet.