Seis príncipes al rescate. Pedri, Fabio, Toni Segura, Josemi, Fortes y Valles, a escena. La despensa de Pepe Mel para paliar los efectos de la tormenta del tope salarial. Veintiún gladiadores aptos -debe acometer tres descartes para conformar la primera convocatoria de 18- en un escenario con 24 inscritos. El técnico de la UD, ante el reto de batir al Huesca en el estreno -domingo, 19.00 horas en el estadio de Gran Canaria-, dispone de catorce fichas profesionales y siete del filial (las Licencias B).
Raúl Fernández, Maikel Mesa y Sergio Ezequiel Araujo, que están inscritos en LaLiga con ficha profesional del pasado curso, causan baja por lesión. Cedrés y Mauricio Lemos también se pierden el envite por un percance físico.
El desajuste salarial del plantel al no cumplir, todavía, con los parámetros del fair play financiero, deja sin inscribir a Álex Suárez, Kirian Rodríguez y Drolé -dos suben del filial y el extremo de Costa Maril es la única contratación en este mercado de verano-.
Pero hay un plan. Se recurre al vivero de forma indiscriminada. Y tiene el OK del órgano de control económico de la patronal del fútbol profesional español. El departamento de Control Económico de LaLiga, con el visto bueno del Órgano de Validación, tramitó ayer las seis licencias sub 23 del conjunto amarillo. Que se suman a las del cancerbero Josep Martínez -dorsal 30-, que ya lucía la Licencia B el pasado 2019-20, en el que alcanzó siete partidos.
Pedro González López 'Pedri', Fabio González Estupiñán, Antonio Segura González 'Toni' Segura, José Miguel Castañeda 'Josemi', Jesús Fortes Socas y Álvaro Valles Roca cuentan con el visto bueno del órgano de Control de LaLiga.
En esa relación de 21 futbolistas, Mel tiene a Rubén Castro entre algodones -por una dolencia en el isquiotibial- y aguarda la llegada del transfer del ariete croata Boris Rapaic como bendición.
Internacional en las categorías inferiores del combinado balcánico y ex del Inter de Milán, se postula titular ante el interrogante eterno de Rubén y el percance de Araujo. Además, Tomás Pekhart, que sí dispone de ficha, no figura en los planes del técnico. Tampoco se le ha encontrado acomodo.
Roque y Rivera
Rubén Castro Martín trabajó ayer con el grupo. Las próximas 72 horas despejarán la ecuación. El Moña o Boris. La dirección deportiva está a la espera del transfer internacional del atacante de Split, que milita en la UD cedido por el Fenerbahçe turco."Llegará entre hoy o mañana; somos optimistas".
Mel dispondría con 21 futbolistas -entre profesionales y licencias sub 23- para medirse al Huesca. Según dicta el reglamento, solo pueden figurar cuatro jugadores con ficha B en el césped y así no incurrir en alineación indebida.
Con Mateo García y Christian Rivera en la plataforma de salida -con la fórmula del traspaso-, se podrá aligerar la masa social. El próximo 2 de septiembre concluye el mercado y desde la UD mantienen que "reina la calma".
El centrocampista asturiano manejaba una propuesta firme del Leganés, pero el conjunto pepinero se ha inclinado finalmente por la cesión de Roque Mesa Quevedo. El timonero teldense llega a Butarque tras ser descartado por Julen Lopetegui en el Sevilla desde el pasado julio. La situación se había convertido en una pesadilla, con la amenaza del sindicato de la AFE de tomar cartas en el asunto. El ex de la UD Las Palmas y Swansea se estaba ejercitando al margen del grupo en Nervión.
De la denuncia a la acción
La nómina de ejecutivos del conjunto grancanario -el director deportivo Rocco Maiorino, el secretario técnico Toni Otero y el jefe del área internacional Branko Milovanovic- priorizan las salidas en 18 días de frenesí. Y la bautizada como obsesión de Mel, el zaguero Mauricio, cada día parece más amarillo. "Es la única alegría", repetía el estratega madrileño.
A 72 horas del inicio del segundo ciclo Mel, llega la hora del novelista. Pedri se postula titular. Es el gran reclamo, con solo 16 años, de una situación de riesgo salvada sobre la bocina en los despachos. Hay munición. Kirian, Álex Suárez y Drolé pagan las consecuencias de la parálisis. El resto -Cedrés o Mauricio- están lesionados. Los príncipes de Barranco Seco apuntan al Huesca en su bautizo.
