Los ingenieros de Opcsa viajan a China para poner en marcha las 'megagrúas' del Puerto de Las Palmas

Las dos máquinas, que ya están terminadas, pasarán una exhaustiva prueba de capacidad y seguridad antes de llegar en septiembre a La Luz

Una delegación de ingenieros isleños viajará en junio a China para probar las dos grúas MalaccaMax que Operaciones Portuarias Canarias SA (Opcsa) le ha comprado a la compañía Shanghai Zhenhua Heavy Industry Co (Zpmc) por valor de 20 millones de euros. Opcsa incorpora las ‘megagrúas’ a su terminal del Puerto de Las Palmas para modernizar la estiba y atender a los mayores portacontenedores del mundo.

Las MalaccaMax son las grúas más grandes del mercado. Tienen 141 metros con la pluma recogida, un alcance de 73 metros y una altura libre desde el muelle de 54 metros. La capacidad máxima de estas máquinas es de 65 toneladas por operación, lo que permite desplazar dos contenedores a la vez mediante un solo movimiento. El rendimiento casi duplica al de una grúa convencional, con cuarenta movimientos a la hora. 

Estas características técnicas hacen a las MalaccaMax superiores en prestaciones a las Post Panamax, que son las habituales en los puertos españoles, con muy pocas terminales y operadores de estiba que hayan dado este salto cualitativo en la actualidad.

Una empresa alemana controla a diario la calidad de todo el proceso de construcción

El plan de Opcsa es traerlas al Puerto de Las Palmas en septiembre para comenzar a trabajar con ellas antes de que finalice el año. Por eso la Autoridad Portuaria de Las Palmas (APLP) lleva a su consejo de administración de esta semana el contrato para adjudicar la obra que facilitará la instalación de las dos grúas mediante la construcción de un nuevo carril en el muelle Cristóbal Colón.

Los técnicos de Opcsa, entre ellos Javier Zurita, han viajado dos veces a China para supervisar todo el proceso de fabricación. El primer viaje fue en febrero, con la finalidad de comprobar la calidad del acero empleado en la construcción, y el segundo en abril, para verificar la disposición de los componentes y el resultado de las soldaduras realizadas, explica el propio Zurita.

En ese segundo viaje se encontraron con una de las grúas ya montadas, pero será en junio, con la tercera expedición programada, cuando esté terminada su hermana gemela y los ingenieros sometan ambas máquinas a un exhaustivo control de calidad. Se trata de una especie de inspección final con una prueba de aceptación incluida. 

Esta prueba es necesaria para culminar el proceso de compra y desembarcar las dos máquinas en el Puerto de Las Palmas. Su finalidad es verificar la funcionalidad de las grúas, esto es, probarlas en todos sus programas, velocidades y situaciones para comprobar que cumple con los movimientos prometidos, entre otros parámetros que son vitales para la actividad de la estiba, como la seguridad o la respuesta ante situaciones de sobrecarga.

Además de esos controles y visitas organizadas a la fábrica china, Opcsa ha contratado los servicios de Tüv Nord, una empresa de origen alemán que está especializada en trabajos globales de inspección reglamentaria e industrial, entre otras funciones. 

Los técnicos de esta compañía tienen oficina en Shanghai, por lo que pasan las 24 horas del día en la fábrica de Zpmc. Su misión es presenciar y corroborar todas las pruebas e intervenciones acordadas en el plan de inspección del proyecto, como la calidad del acero, la terminación de las soldaduras o las mediciones del espesor de las pinturas empleadas. 

Nada debe escapar al control de Tüv Nord, cuyos ingenieros participarán también en la prueba final con la delegación canaria para certificar que las grúas funcionan de manera correcta.

Tras el visto bueno de los técnicos en junio, si la prueba final sale con el resultado previsto, un barco especial transportará las dos grúas hasta el Puerto de Las Palmas. Tras dos meses y diez días de navegación, está previsto que las MalaccaMax arriben en septiembre, con el objetivo de que estén operativas antes de finalizar el año.

Las MalaccaMax atenderán a los portacontenedores más grandes de la naviera MSC

Estas grandes grúas están diseñadas para atender a los mayores buques de la naviera Mediterranean Shipping Company (MSC), como el MSC Gulsun, que con 400 metros de eslora y 61,5 de manga tiene capacidad para transportar 23.700 TEUs. 

Estarán, además, entre las infraestructuras industriales más altas de la capital grancanaria junto a la chimenea de la central eléctrica de Jinámar o el aerogenerador marino de la Plocan.

Suscríbete para seguir leyendo