Puerto

Los veleros se conectan a los satélites de Elon Musk para disponer de internet

Una embarcación local que viaja por Azores y un catamarán portugués instalan en el Muelle Deportivo los StarLink del magnate para tener cobertura en alta mar

Juan Carlos Rodríguez y Oliver Rodríguez, de Rolnautic, manipulan la antena del sistema StarLink. | | LP/DLP

Juan Carlos Rodríguez y Oliver Rodríguez, de Rolnautic, manipulan la antena del sistema StarLink. | | LP/DLP / M. Reyes

Canarias comienza a conectarse a los mini satélites que el magnate estadounidense Elon Musk ha lanzado al espacio para ofrecer a los ciudadanos conexión global por internet vía satélite.

El proyecto, que está disponible en casi todo el planeta con diferentes modalidades de uso, parece especialmente útil para cubrir zonas alejadas o remotas con dificultades para conectarse a la red por los medios convencionales. El servicio se llama StarLink Connect, está gestionado por la empresa SpaceX y ofrece planes de conexión para residencias, barcos, empresas o particulares con necesidades móviles o itinerantes, como los autocaravanistas.

Los elevados precios de lanzamiento iniciales, al estar ahora más bajos que el año pasado, han facilitado su comercialización en Canarias, sobre todo en el sector marítimo, donde hay embarcaciones de recreo con base en el Muelle Deportivo de Las Palmas que han optado por instalar esta tecnología, explica Juan Carlos Rodríguez, que vende el producto en Rolnautic, uno de las compañías punteras de la náutica isleña.

La antena cuadrada y portátil patentada para los barcos por Elon Musk, también propietario de Tesla y de Twitter, salió a la venta el verano pasado por 5.000 euros, pero empresas como Rolnautic han lanzado ofertas competitivas para que los clientes puedan adquirirla por 3.010 euros en la marina de Las Palmas, como hicieron en la pasada Feria Internacional del Mar (Fimar), donde presentaron por primera vez este novedosos sistema de conexión móvil por satélite.

El ingenio te permite tener internet en alta mar sin sobresaltos, con una velocidad de descarga máxima de 220 Mbps y una cobertura global que incluye la mayoría de los océanos. En tierra la capacidad llega hasta los 500 Mbps. Todo dependerá de la cantidad de usuarios conectados al mismo tiempo al sistema.

La empresa, además, presume de la dureza de sus aparatos, que aguantan condiciones meteorológicas extremas, incluso las vibraciones de los cohetes que Space X lanza al espacio, recoge la web de StarLink.

La instalación de la antena es sencilla, sobre la cubierta de la embarcación, pudiendo parar y reanudar el servicio cuando el cliente lo desee, siempre dentro del mes contratado porque el servicio tiene una facturación mensual. Esto permite a los usuarios organizarse en función de las necesidades de los viajes individuales, con planes específicos para las casas, las caravanas y el sector marítimo.

Todas estas características y funciones las confirma Rolnautic, que ha montado recientemente dos StarLink en su taller de Las Palmas. Uno lo lleva un catamarán portugués que hizo escala en la capital durante Fimar, y el otro es un velero del Muelle Deportivo que ha estrenado el sistema de telecomunicaciones en un viaje por Las Azores, Madeira y Cabo Verde. En la factura de junio abonó 93 euros mensuales de suscripción y 81 euros por el tráfico de datos, que va en función de los contenidos consumidos.

La suscripción para las casas o residencias es algo más barata que la de los barcos, sobre los 75 euros al mes. El sistema, en ambos casos, está diseñado para que te conectes desde el móvil o la tablet y disfrutes de cualquier contenido, como las series o las películas de tu plataforma preferida.

El StarLink, además, viene a sustituir o mejorar las prestaciones de los equipos de telecomunicaciones de los barcos, que suelen funcionar mediante el teléfono tradicional y suelen disponer de planes de funcionamiento más caros, opina Rodríguez.

Elon Musk aspira a colocar en el espacio hasta 30.000 satélites para crear una red alternativa a la fibra óptica y el 5G que revolucione el internet de las cosas en zonas con dificultades de conexión. Se trata de esas lucecitas que se vieron a principios de año en Canarias y que tienen en pie de guerra a los astrónomos por la contaminación lumínica y la basura espacial. Esos destellos, visibles desde tierra, los produce la gran cantidad de panales solares que los satélites llevan incorporados.

Suscríbete para seguir leyendo