La UD Las Palmas se queda como estaba

Ninguna entrada y ninguna salida en el último día del mercado estival, pero sí múltiples ofrecimientos, tal y como había sucedido durante prácticamente toda la semana. Las horas finales antes del cierre del plazo de inscripciones transcurrieron ayer en las oficinas de Pío XII con cierta calma, algo que las altas esferas de la entidad amarilla barruntaban desde que se les cayó la cesión del central brasileño Joao Víctor, que milita en el Benfica, el pasado miércoles. La incorporación de un central, la última pretensión del club dependía finalmente de una carambola, un efecto dominó que no se produjo y, en consecuencia, dejó a la plantilla con 24 fichas profesionales, lo que significa que quedó una libre. Para Fabio en enero.

El único sobresalto en el último día de la ventana de fichajes se produjo cuando el RCD Espanyol hizo una oferta por Eric Curbelo. Según fuentes de la UD, la cantidad de la misma ascendía a «unos dos millones», si bien no especificaron si iba a abonarse de golpe o si había un objetivo de por medio. En cualquier caso, resulta llamativo que un equipo de Segunda División haya ofrecido tal cifra por un futbolista que termina contrato en junio del próximo año. Ahora la intención tanto del jugador como la del club es sentarse para negociar una renovación en los próximos meses.

En este sentido, cabe recordar que el Olympiakos del Pireo, tal y como reconoció Miguel Ángel Ramírez, ofreció «algo menos de dos millones» por Sergi Cardona, cantidad que aceptó, sin embargo, el futbolista no quiso salir. El lateral catalán, junto a Coco, Moleiro y Pejiño, eran los activos principales con los que la UD podría haber ingresado este verano, pero ninguna de las propuestas gustó al club, que se sentía con poder en las negociaciones porque ninguno de ellos termina contrato a final de temporada.

Así pues, el único traspaso que hizo el club en este mercado es el de Álex Domínguez al Toulouse francés en plena concentración en Marbella. El portero es uno de los 11 futbolistas que terminaron el curso pasado y que lograron el ascenso a la máxima categoría que no siguen. Enrique Clemente, por su parte, renovó hasta 2026 y se marchó cedido al Racing de Ferrol; los otros nueve, algunos de ellos a préstamo, terminaron sus respectivos contratos.

Casos especiales

Si las bajas fueron 11, las altas también, aunque dos de ellas, las de Sandro Ramírez y Marvin Park, son especiales, ya que ambos estuvieron el curso pasado en el plantel y ahora lo están en otro contexto: el delantero ahora es propiedad de la UD tras el pago de un millón a la SD Huesca y el extremo está otra vez cedido por el Real Madrid pero con una compra obligatoria de un millón si el equipo logra la permanencia.

Por lo tanto, las caras nuevas en la UD Las Palmas 2023-24 son nueve, tres de ellos cedidos desde otros equipos. Todas las líneas han sido reforzadas. La salida de Álex Domínguez conllevó la llegada de Aarón Escandell, pretendido desde antes incluso de que el equipo lograra el ascenso. El club pagó alrededor de 400.000 euros por él.

En el lateral derecho llegó Julián Araujo cedido por el FC Barcelona, y en el izquierdo, Daley Sinkgraven, libre desde el Bayer Leverkusen. Para el centro de la defensa aterrizó uno de los deseados desde el verano pasado, Mika Mármol, en propiedad a cambio de 1,9 millones –lo cobró el Andorra– y del 50% del jugador –que mantiene el Barça–.

Para el centro del campo la dirección deportiva incorporó a Javi Muñoz, libre tras no conseguir el ascenso con el Eibar, y Máximo Perrone, cedido por el Manchester City. Arriba, los nuevos son Munir, convencido por Xavi García Pimienta, Sory Kaba, fichado por 1,5 millones más otro medio millón en variables –llegó desde el Midtjylland– y Cristian Herrera, libre tras descender con el Ibiza y candidato principal a abrir hueco en el mercado de invierno –aún no ha debutado–.

La guinda a la plantilla habría sido un central más, pero finalmente no llegó. La opción inicial fue la de Eray Comert, pero el suizo que militaba en el Valencia y ahora en el Nantes rechazó a la UD; cuando quiso aceptar, fue el club el que le dio el ‘no’. Días atrás la entidad amarilla y el Benfica llegaron a un acuerdo por Joao Víctor, pero el brasileño declinó la oferta. La últimas opciones dependían de una carambola y un efecto dominó en las últimas horas. No se produjo. Y la UD se quedó como estaba.

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