Comercio

El solomillo y el marisco alimentan los propósitos de año nuevo

Los clientes buscan los platos habituales para servir la mesa en Nochevieja, a pesar de que sea necesario apretar el cinturón por el alza de precios en los alimentos

Uvas, picoteo y platos principales. La cena de Nochevieja está a la vuelta de la esquina, y las despensas y neveras comienzan a llenarse de los productos típicos para estas fechas. En el Mercado Altavista las carnicerías deshuesan, muelen y cortan la carne, en las pescaderías venden el marisco como churros, y los fruteros despachan las uvas a mansalva. Todo está preparado para despedir 2024 y los clientes ultiman las compras para dejar con la boca abierta a todos los comensales.

Conchi Hernández está en la cola de la frutería para ir tachando todos los artículos de la lista de la compra. "Solemos poner más picoteo que cena, hacemos unas papitas arrugadas, marisco, embutido, truchitas", enumera. Hernández incorpora algunas piezas de fruta en la mesa para "equilibrar los excesos". "Suelo comprar la que está de temporada, a buen precio y sobre todo que sea de calidad", refleja. Hernández observa que la inflación se nota bastante en el precio final, pero al ser unas fechas especiales han decidido apretar las cuentas familiares. "Se sacrifica en un día y todos colaboramos", afirma.

Las que no pueden faltar son las uvas, que este año están un 50% más caras que el anterior. A pesar de ello, desde el Mercado Altavista no han percibido menos ventas, la propietaria de Futas y Verduras Quintero, Beatriz Quintero destaca que están por lo menos un euro y medio más caras, y señala que en su puesto están a 5,10 euros el kilo. "La gente las sigue comprando igualmente, pero prefieren este año sin pipas que son más difíciles de conseguir y, por lo tanto, están más caras", refleja Quintero. Además de la gran protagonista para Fin de Año, la empresaria enumera que ha vendido mucha papa, puerro, pimiento, y todas aquellas verduras que sirven para hacer caldos y sopas. Sin embargo, destaca que en los últimos años las comidas preparadas están experimentando un apogeo, y cada vez menos personas optan por preparar la comida desde cero.

Un cambio en los hábitos

Desde la Carnicería Guerra, Ángel Francisco considera que ha cambiado la forma de comer de la población y es cada vez es menos habitual que preparen grandes cenas. Francisco analiza que lo habitual hace unos años era servir en la mesa cabrito, pero desde hace un tiempo se ha puesto de moda el solomillo, y "luego esta moda se pasa". Uno de sus clientes es Héctor Alfredo que espera en la cola a ser atendido. Engalanará la mesa por todo lo alto con platos de todo tipo, ha comprado cabrito para preparar en salsa, carne para empanar, unas milanesas a la napolitana y una pechuga para hacer con hojaldre, además de unas papas a la crema. "Venimos por la calidad, esta es la mejor carnicería", comenta el Alfredo que visita la plaza de abastos toda la semana para hacer la compra.

Beatriz Quintero muestra la uvas de su puesto Frutas, Verduras Quintero en el Mercado Altavista.

Beatriz Quintero muestra la uvas de su puesto Frutas, Verduras Quintero en el Mercado Altavista. / Juan Castro

A pesar de los clientes fijos, Francisco observa que los clientes son menos: "Debería haber un follón de gente, y no". Luis González de la carnicería Gomarpe piensa de la misma manera. "La cosa está mal las ventas han bajado, solo tienes que mirar el Mercado", comenta. La plaza de abastos ha mermado en su oferta al cerrar muchos de sus puestos y la afluencia ya no es la misma que en el pasado. A pesar de la situación, las Navidades siguen siendo una buena época para muchos puesteros. "La Navidad bien, el resto del año mal", puntualiza Judith Dávila de Elaborados Gomarpe. "En las fiestas la gente se vuelve loca, aunque no tengan para gastar, el 23 fue una locura de ventas", comenta. Dávila explica que en Nochebuena los clientes suelen hacer cenas más copiosas y, en cambio, en Fin de Año buscan más picoteo y productos para asaderos. "Se ha vendido lo de siempre, mucho ibérico, salchichón, jamón serrano o vena en salsa", cuenta.

El queso es otro imprescindible en las mesas canarias y en Quesos y Comestibles Antonio estas fiestas están siendo provechosas, ya que han vendido más que en otras ocasiones. "Están comprando variedad para poner en la mesa un poco de todo, no siempre lo mismo", explica. Los más vendidos han sido el queso semicurado de la Cumbre, los de Guía, Gáldar, el curado majorero y el de Fagagesto. Yolanda del Rosario, dueña de la Quesería Quintana asegura que los clientes demandan "mucho queso de todo tipo". "Desde majorero, de Guía, de la Cumbre, piden mucha variedad, incluso queso fresco que viene todos los días", comenta. Otros de los productos estrella son los chorizos de Teror, las aceitunas, la miel del país y los productos navideños de la dulcería de Tejeda.

Trabajadores en la pescadería Jumar Artiles.

Trabajadores en la pescadería Jumar Artiles. / Juan Castro

En las pescaderías el protagonista es el marisco, un plato que no falta en las mesas. "La gente suele ser tradicional", apunta el dueño de Jumar Artiles, Juan Alberto Pérez. "Almejas, mejillones y pescados grandes para hacer al horno como el cherne o la sama", destaca el puestero como el género más vendido. Pérez considera que la afluencia de clientes aún es baja, pero esperan por los rezagados, ya que el mercado abre también el domingo 31.

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