Los vertidos de la charca de San Lorenzo se encaminan a los juzgados

El grupo Agonane-Ecologistas en acción denuncia ante la Fiscalía de Medio Ambiente la pérdida de agua intencionada de la mareta junto a la carretera GC-308

La charca de San Lorenzo, prácticamente seca este fin de semana.

La charca de San Lorenzo, prácticamente seca este fin de semana. / LP/DLP

Los vertidos de la charca de San Lorenzo se encaminan a los juzgados. El grupo ecologista Agonane-Ecologistas en acción ha presentado ante la Fiscalía de Medio Ambiente un supuesto atentado contra los recursos naturales y presunta comisión de delito por vertido en un espacio natural protegido. Desde el colectivo alertan de la situación "perjudicial" que está viviendo la avifauna que habita este humedal desde que el propietario de los terrenos decidiera vaciarla ante la falta de acuerdo con el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria para su compra.

Vecinos y ecologistas llevan desde principios de mes denunciando el vaciado de una de las pocas maretas que permanecía con agua en las charcas de San Lorenzo. Se trata de un estanque de arcilla cercano al barrio de Riscos Negros, junto a la carretera GC-308, que conecta Tamaraceite con el casco de San Lorenzo. A lo largo del último mes el nivel del agua ha ido bajando considerablemente hasta quedar en estos momentos prácticamente seca. Y todo esto en plena época migratoria de aves. En la denuncia adjuntan imágenes que así lo atestiguan.

Los ecologistas resaltan que este paraje se encuentra delimitado dentro del Paisaje Protegido de Pino Santo (C-23). En el escrito que han presentado ante la Fiscalía, señalan que ponen en su conocimiento "lo que consideramos actuaciones contrarias al medio ambiente, la naturaleza y los valores que en este lugar están siendo afectados". En la denuncia, aseguran que la propiedad del estanque -el empresario Felipe Guerra- "de forma intencionada y alevosa ha procedido a abrir las válvulas que regulan el vaciado del estanque".

Calificar el precio del terreno

Según estos, se trata de un acto "anunciado públicamente por el propietario" que está motivado al no llegar a ningún tipo de acuerdo de compra con el Ayuntamiento capitalino. El Consistorio lleva varios años negociando con el empresario la compra del estanque con el propósito de crear un parque agroambiental, pero una serie de desavenencias a la hora de calificar el precio del terreno por parte de los técnicos han dejado estancados los acuerdos.

El grupo de activistas entienden que se trata de una propiedad privada, pero matizan que resaltan la "afección" a un bien jurídico a proteger y que este "no se puede convertir en moneda de cambio". Es más, aclaran que si las más de 40 especies que frecuentan este humedal -protegidas dentro del catálogo canario de especies amenazadas- "se quedan sin el preciado líquido elemento, la afección es tal que podemos hablar de pérdidas de individuos".

Un año perdido

También resaltan que están en peligros los cortejos "y, por tanto, la pérdida de un año de reproducción", dado que muchas de las aves que escogen las Islas para huir del frío europeo están en plena época de cría, "esto no se puede asumir, pues hablamos de individuos de especies que necesitan recuperarse". Además, alertan de la acción negativa que podrían suponer los gatos que frecuentan esta zona al estar las aves indefensas.

En la denuncia, resaltan que se está incumpliendo en el artículo 150 del Plan Especial del Paisaje Protegido de Pino Santo, "que establece garantizar una lámina de agua en cada charca de unos 50 centímetros de profundidad". Es más, desde Agonane resaltan que "no se ha llevado a cabo ninguna de conservación prevista" en el citado planeamiento. Y es que el conjunto de estanques de barro de San Lorenzo lleva décadas de deterioro a raíz del abandono de la agricultura.

Plan Especial de Pino Santo

Entre los puntos que se estarían vulnerando de la regulación del Paisaje Protegido de Pino Santo, están la recuperación de zonas de interés faunístico, del área como humedal -lo que incluye la retirada de residuos sólidos y la lámina mínima de agua exigida-, además del adecentamiento de la zona como espacio de divulgación de la naturaleza. Este último punto contempla la restauración de las infraestructuras hidráulicas abandonadas, la creación de un centro de interpretación o museo del agua, la colocación de carteles que delimiten la zona como "espacio ornitológico" y un mirador en los altos de San Gregorio.

El Ayuntamiento aprobó en septiembre de 2020 por unanimidad, a través de una moción de CC, comprar las charcas de San Lorenzo. Desde entonces las conversaciones con los propietarios de esta y otras maretas no han llegado a buen puerto. No obstante, el Consistorio incluyó entre las obras previstas a financiar con los fondos del Fdcan (Fondo de Desarrollo de Canarias) para el periodo 2023-2027 la recuperación de este espacio natural protegido.

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