La cuota canaria en Primera

Con el alta de Cristian y la compra de Sandro, Pimienta dispone de diez canarios con ficha profesional

En el ciclo anterior en Primera, tres cursos, la media se fijó en catorce isleños

El capitán de la UD Jonathan Viera Ramos celebra su tanto en el Bernabéu ante el Real Madrid, en marzo de 2017, con Nacho en el margen izquierdo. | | LP/DLP / Paco Cabrera

Las Palmas de Gran Canaria 27 JUN 2023 12:00 Actualizada 27 JUN 2023 12:09

Canariedad en la cima del mundo. Plataforma de sueños y magia autóctona. La UD mantiene su dogma de competir con platanitos en Primera. Lo hizo tras el alzamiento del 21-J de 2015, 16 canarios con ficha profesional en la siguiente 2015-16, y ha puesto la directa con el fichaje de Cristian Herrera. El delantero, formado en la factoría de Siete Palmas, volverá a vestir de amarillo una década después.

El salto de categoría, conquistado hace un mes –27 de mayo–, no ha pervertido la hoja de ruta de la entidad grancanaria. Con la citada incorporación del que fuese delantero en el Elche, Almería, Lugo e Ibiza, hay diez jugadores del Archipiélago con licencia profesional –ver cuadro del margen derecho–. Son Eric Curbelo y Álex Suárez (atados hasta junio de 2024 y con el que se negocia ya una ampliación hasta 2026), Saúl Coco (2025), Jonathan Viera (2027), Sandro Ramírez (2026), Alberto Moleiro (2026), Fabio González (2025), Benito Ramírez (2025) y Kirian Rodríguez (2026).

En el caso de Cristian Herrera, de 32 años, se compromete hasta junio de 2024. Cuenta con 47 duelos en la máxima categoría y puede ejercer de guía espiritual. Tiene nueve goles en la liga de las estrellas, por las 27 dianas de Sandro Ramírez y 28 de Jonathan Viera. SR-9 suma 157 encuentros en la máxima categoría y el genio de La Feria, 134. Marc Cardona (34), Benito Ramírez (6), Álvaro Lemos (5) o Fabio González (1) tienen un recorrido más tímido. En el apartado de debutantes, figuran los Álvaro Valles, Álex Suárez, Sergi Cardona, Saúl Coco, Eric Curbelo, Kirian Rodríguez o Alberto Moleiro. Pero el Gran Canaria es la mejor facultad. En la 15-16, primero con Herrera y luego con Quique Setién, explotó la generación de oro.

Raúl Lizoain, David Simón, Ángel López, Vicente Gómez, David García, Nauzet Alemán, Asdrúbal Padrón, Momo, Hernán Santana, Roque Mesa, Aythami Artiles, Javi Castellano, Jonathan Viera, Valerón, Dani Castellano y Tana fueron los 16 activos de la tierra con licencia profesional. Impactó el gran rendimiento de debutantes como Roque o Vicente, así como Tana –que no contó para Herrera en la campaña del ascenso–. En la 16-17, Setién activó la operación salida y fulminó la continuidad de Nauzet, Valerón o Ángel López.

En ese segundo curso consecutivo en la mejor liga del mundo, ya con Setién desde la primera jornada, se alcanzaron los quince jugadores de la tierra con licencia profesional. El rendimiento de un veterano como Momo también fue para enmarcar. Un galáctico como Jesé Rodríguez, que llegó cedido por el PSG, disputó los 16 partidos en la segunda vuelta. La UD fue líder, tras un inicio brutal, y se derrumbó en la segunda vuelta.

Y en la tercera y última, la 17-18, la cuota de canarios se fijó en trece. Lo que deja una media de catorce en ese ciclo de 57 partidos ligueros y 14 de Copa del Rey. Además, cabe reseñar la presencia de mimbres con licencia del filial y que también aportaron su granito de arena como con minutos y goles como Nili Perdomo, Erik Expósito, Benito o Fabio González.

La apuesta es categórica, 44 jugadores con dorsal entre el ‘1’ y el ‘25’ durante tres campañas con denominación de origen. A dos semanas del inicio de los entrenamientos. Pimienta ya tiene a sus órdenes a diez futbolistas de la tierra. Cuatro temporadas en Primera y 54 rostros del Archipiélago.

Patrimonio

La UD fue 11ª y luego 14ª. En la 17-18, penúltima tras acometer 17 fichajes. Se perdió el rumbo. Adiós a las coordenadas de magia. «Resultó un desastre», reconoció Viera a este medio. La venta de Roque Mesa al Swansea (por doce millones en julio de 2017) y la del mediapunta de La Feria al Beijing (22 kilos en febrero de 2018) terminaron por desmantelar el proyecto. Parece que se ha aprendido la lección.Elevar la cuota de canariedad es una garantía de éxito, lo avalan las estadísticas del último ciclo en la cima del mundo. En el clima de austeridad actual –70 millones de presupuesto–, abrazar el Roque Nublo es un guiño a la lógica. A falta de seis contrataciones, Pimienta, Viera y la legión de Kirian son los escuderos. Como aconteció en 2016 y 2017, los debutantes se convirtieron en héroes. El escudo de la UD como agua bendita.

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Una explicación diez años después de una espantada. Del portazo de 2013 a una ilusión desbordante por formar parte del proyecto de Viera y Pimienta. Cristian Herrera, que dejó la casa amarilla hace una década por un desacuerdo contractual, zanja el asunto. «No fue una decisión cómoda, llegaron dudas y estuvimos así hasta el final. Que sí, que no». El atacante desvela que «se modificaron algunas cosas del contrato que no estaban pactadas y al final llegó la oferta [militar en el filial del Elche]; la vimos y yo opté por irme». Esa vacilación de última hora forzó la marcha de Herrera, que acabó en Primera con el Elche, para luego militar en el Almería, Girona, Lugo e Ibiza, club con el que bajó. | LP / DLP

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